Even if Viagra is not needed, it is possible that the doctor will be able to determine the etiology of erectile dysfunction and prescribe appropriate treatmen https://vgraustralia.net it doesn't pay to forget about sexual activeness even at the first sings of malfunction.
Guias slanh_2013_06
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 1
Guías SLANH
2013 Revista Nefrología. Órgano Oficial de la Sociedad Española de Nefrología
Guías de práctica clínica para la prevención,
diagnóstico, evaluación y tratamiento de los trastornos
minerales y óseos en la enfermedad renal crónica
(TMO-ERC) en adultos
Ezequiel Bellorin-Font, Pablo Ambrosoni, Raúl G. Carlini, Aluizio B. Carvalho,
Ricardo Correa-Rotter, Alfonso Cueto-Manzano, Aquiles Jara, Vanda Jorgetti,
Armando Negri, Inés Olaizola, Isidro Salusky, Eduardo Slatopolsky, José R. Weisinger.
Por el Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, Sociedad Latinoamericana de Nefrología
e Hipertensión (SLANH)*
Las guías de práctica clínica para la prevención, diag-
prevention, and treatment of Chronic Kidney Disease-
nóstico, evaluación y tratamiento de los trastornos mi-
Mineral and Bone Disorder [CKD-MBD])
, adaptadas a
nerales y óseos en la enfermedad renal crónica (TMO-
las condiciones de pacientes, instituciones y recursos
ERC) en adultos, de la Sociedad Latinoamericana de
disponibles en Latinoamérica, con el aval de KDIGO. En
Nefrología e Hipertensión (SLANH), comprenden un
algunos casos, las guías corresponden a recomendacio-
conjunto de recomendaciones elaboradas para dar
nes de manejo definidas directamente por el grupo de
apoyo al médico en el manejo de estas anormalidades
trabajo para su aplicación en nuestra región, basadas
en pacientes adultos con enfermedad renal estadios 3
en la evidencia disponible en la literatura. Cada capí-
a 5. No se incluyen las alteraciones asociadas al tras-
tulo contiene las guías propiamente dichas y su funda-
plante renal. Los temas abordados en las guías están
mentación con base en numerosas referencias biblio-
distribuidos en cuatro capítulos: 1) Evaluación de las
gráficas actualizadas. Desafortunadamente, existen
alteraciones bioquímicas; 2) Evaluación de las altera-
pocos estudios controlados y con un poder estadístico
ciones óseas; 3) Evaluación de las calcificaciones vascu-
suficiente en Latinoamérica para dar soporte a reco-
lares, y 4) Tratamiento de los TMO-ERC. Las guías tie-
mendaciones específicas para la región, por lo que la
nen como base las recomendaciones propuestas y
gran mayoría de las referencias utilizadas correspon-
publicadas por la Kidney Disease: Improving Global
den a estudios realizados en otras regiones. Esto pone
Outcomes (KDIGO) para la prevención, diagnóstico,
en evidencia la necesidad de planificar estudios de in-
evaluación y tratamiento de los TMO-ERC (
KDIGO Cli-
vestigación dirigidos a establecer la situación actual de
nical practice guideline for the diagnosis, evaluation,
los trastornos del metabolismo mineral y óseo en Lati-noamérica, así como definir las mejores opciones tera-péuticas para nuestra población.
Correspondencia: Ezequiel Bellorin-Font
Coordinador.
Palabras clave: Enfermedad renal crónica. Ostodistrofia re-
Hospital Universitario de Caracas. Venezuela
nal. Metabolismo mineral y óseo. PTH. Vitamina D.
Hiperparatiroidismo secundario. Trastornos del metabolismo.
* Grupo formado por: Dr. Ezequiel Bellorin-Font. Coordinador. Hospital Universitario de Caracas. Caracas, Venezuela;
Dr. Pablo Ambrosoni.
Hospital de clínicas. UDELAR. Montevideo, Uruguay;
Dr. Raúl G. Carlini. Ministerio del Poder Popular para La Salud. Caracas, Venezuela;
Dr. Aluizio B. Carvalho.
Universidad Federal de Sao Paulo. Sao Paulo, Brasil;
Dr. Ricardo Correa-Rotter. Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán. Ciudad de
México, México;
Dr. Alfonso Cueto-Manzano. Hospital de Especialidades, CMNO. Guadalajara, México;
Dr. Aquiles Jara. Pontificia Universidad Católica. Santiago
de Chile, Chile;
Dra. Vanda Jorgetti. Universidad de Sao Paulo. Sao Paulo, Brasil;
Dr. Armando Negri. Universidad del Salvador. Buenos Aires, Argentina;
Dra. Inés Olaizola. Hospital de Clínicas. Montevideo, Uruguay;
Dr. Isidro Salusky. University of California. Los Ángeles, EE. UU.;
Dr. Eduardo Slatopolsky.
Washington University. Saint Louis, EE. UU.;
Dr. José R. Weisinger. University of Miami Health System. Miami, EE. UU.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 2
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
traducciones de las guías han sido marcados con las ini-ciales KDIGO al final del párrafo respectivo; mientras
La elaboración de las Guías de práctica clínica para la
que los que corresponden a modificaciones o adaptacio-
prevención, diagnóstico, evaluación y tratamiento de los
nes de las guías realizados por el Comité de la SLANH
trastornos minerales y óseos en la enfermedad renal cró-
han sido marcados con las iniciales SLANH.
nica (TMO-ERC) en adultos es una iniciativa de la So-ciedad Latinoamericana de Nefrología e Hipertensión
Los razonamientos que soportan las recomendaciones de
(SLANH). Su elaboración estuvo a cargo del Comité de
estas guías han sido actualizados mediante la inclusión
Metabolismo Mineral y Óseo de la SLANH, constituido
de nuevas referencias bibliográficas. Por otra parte, en
por una representación internacional de líderes en el área
muchos casos fueron motivo de amplia discusión a fin de
del metabolismo mineral y óseo en la enfermedad renal
buscar una mejor adaptación a las condiciones regiona-
les y facilitar su aplicación.
Se trata de una guía práctica para la estandarización del
Los temas abordados en las guías están constituidos en
diagnóstico y tratamiento de los trastornos minerales y
cuatro capítulos. Cada capítulo contiene las guías propia-
óseos de la enfermedad renal crónica (ERC) en sus dife-
mente dichas, seguidas de una fundamentación basada en
rentes etapas (tabla A). Siguiendo la misma tendencia de
un número de referencias bibliográficas. El razonamien-
la comunidad nefrológica mundial, estas guías tienen
to representa un resumen de la literatura sobre cada guía
como base las recomendaciones propuestas y publicadas
en cuestión, dirigido a justificar la recomendación allí
por la Kidney Disease: Improving Global Outcomes
vertida. Se utilizó el término
evidencia toda vez que la
(KDIGO) para la prevención, diagnóstico, evaluación y
directriz se basó en evidencia publicada en la literatura,
tratamiento de los TMO-ERC (
KDIGO Clinical practice
independiente de su gradación. Por el contrario, se utili-
guideline for the diagnosis, evaluation, prevention, and
zó el término
opinión, de acuerdo a las opiniones conte-
treatment of Chronic Kidney Disease-Mineral and Bone
nidas en las directrices consultadas, muchas veces adap-
Disorder [CKD-MBD])1
, así como directrices publicadas
tadas a la experiencia personal de los miembros del foro.
por las Sociedades de Nefrología de Argentina, Brasil,
En las tablas B y C se encuentran los criterios utilizados
México y Uruguay a fin de cubrir necesidades y condi-
para la definir la fortaleza y la calidad de la evidencia1.
ciones de pacientes, instituciones y recursos materialesdisponibles en Latinoamérica. Los elementos de las guías
Es importante destacar que, como toda guía de práctica
KDIGO utilizados en su preparación fueron resumidos,
clínica, su consulta debe ser hecha con buen tino, pen-
actualizados y adaptados sin alterar su esencia. La utili-
sando siempre que la conducta médica con cada paciente
zación de enunciados y conceptos originales de las guías
es individual y soberana. Este foro permanecerá abierto
KDIGO ha sido autorizada por dicha organización. En tal
a futuras revisiones, y las críticas y sugerencias serán
sentido, aquellos párrafos correspondientes a estrictas
Tabla A. Estadios de la enfermedad renal crónica
Estadio de ERC
Daño renal con disminución
1-5T si es paciente
discreta de la TFG
Daño renal con disminución
discreta de la TFG
Disminución moderada de la TFG
Disminución severa de la TFG
Insuficiencia renal
< 15 (o diálisis)
5D si es paciente en diálisis
KDIGO Clinical practice guideline for the diagnosis, evaluation, prevention, and treatment of Chronic Kidney Disease-Mineral andBone Disorder (CKD-MBD)1.
ERC: enfermedad renal crónica; TFG: tasa de filtración glomerular.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 3
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla B. Fortaleza de la evidencia
La mayoría en su
La mayoría de los pacientes
La recomendación puede
situación desearía el curso
deberían recibir el curso
ser adoptada como una
de acción recomendado
de acción recomendado
política en la mayoría
de las situaciones
La mayoría en su
Pueden ser apropiadas
La recomendación puede
situación desearía el curso
diferentes opciones para
requerir debate antes de
de acción recomendado,
que se pueda determinar
KDIGO Clinical practice guideline for the diagnosis, evaluation, prevention, and treatment of Chronic Kidney Disease-Mineral andBone Disorder (CKD-MBD)1.
Tabla C. Calidad de la evidencia
Calidad de la evidencia
Tenemos confianza en que el
verdadero efecto es cercano al estimado
El efecto verdadero es probablemente
cercano al estimado, pero es posible
que sea sustancialmente diferente
El verdadero efecto puede
ser sustancialmente diferente al estimado
El efecto estimado es muy incierto,
y frecuentemente puede ser lejano a la verdad
KDIGO Clinical practice guideline for the diagnosis, evaluation, prevention, and treatment of Chronic Kidney Disease-Mineral andBone Disorder (CKD-MBD)1.
neado proximal y resulta en un aumento de la excreciónrenal de fósforo. El FGF-23 inhibe la 1-α-hidroxilasa, lo
Los trastornos del metabolismo mineral y óseo asociados
cual reduce la producción de calcitriol por el riñón y con-
a la enfermedad renal crónica (TMO-ERC) incluyen: a)
secuentemente eleva la producción de PTH4,5. El hiperpa-
alteraciones bioquímicas (calcio, fósforo, hormona para-
ratiroidismo resultante incrementa la excreción renal de
tiroidea [PTH] y vitamina D); b) alteraciones del recam-
fósforo6. Aunque el FGF-23 actúa en las paratiroides su-
bio, mineralización, volumen, crecimiento lineal y resis-
primiendo la producción de PTH, la elevación de esta úl-
tencia óseas; y c) presencia de calcificaciones vasculares
tima, a pesar de niveles altos de FGF-23 en pacientes con
y de tejidos blandos. El término osteodistrofia renal debe
uremia, sugiere resistencia de las paratiroides al efecto su-
utilizarse solo para definir las alteraciones de la histolo-
presor de PTH por parte del FGF-237,8.
gía ósea que ocurren en pacientes con ERC1. La fisiopa-tología de esta complicación es compleja y se esquemati-
Si bien existe una relación directa entre la concentración de
za en la figura 1.
fósforo sérico y el aumento de la producción de FGF-23, al-gunas evidencias recientes indican que este factor se ele-
A medida que progresa la ERC, disminuye la excreción
va en etapas tempranas de la ERC, cuando aún no se ha
renal de fósforo, lo cual lleva a su retención en el orga-
producido la hiperfosfatemia. De hecho, la hiperfosfate-
nismo2. Sin embargo, bajo condiciones clínicas la carga
mia es infrecuente con una filtración glomerular por enci-
de fósforo estimula la producción del factor de crecimien-
ma de 20 ml/min. Los mecanismos de la elevación del
to de fibroblastos 23 (FGF-23) por los osteocitos3, el cual
FGF-23 en estas etapas no están claros. En un estudio re-
a su vez inhibe al cotransportador Na/P del túbulo contor-
ciente en niños se demuestra la presencia de FGF-23 en
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 4
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
osteocitos de pacientes con ERC estadios 2-49. La expre-
ción puede llegar a normalizar la calcemia y la fosfatemia
sión de FGF-23 en osteocitos no mostró diferencias entre
temporalmente, lo hace a expensas de inducir alteraciones
pacientes con ERC en etapas tempranas y pacientes en
del recambio óseo14.
diálisis. Sin embargo, los niveles séricos fueron menoresen los pacientes con ERC sin diálisis, probablemente
Otra posible complicación es la calcificación inadecuada
como consecuencia del aclaramiento renal de FGF-23.
de los huesos (osteomalacia) a consecuencia de la defi-ciencia de calcitriol.
En fases más avanzadas de la ERC, los niveles séricosde calcitriol disminuyen aún más, lo cual lleva a una
La biopsia ósea permite distinguir entre los distintos tipos
disminución en la absorción de calcio, constituyendo
de osteodistrofia renal15.
así un estímulo adicional para la síntesis de PTH6,10,11. Ladisminución del calcitriol es también el resultado de la
El término osteodistrofia renal se refiere al conjunto de
reducción del número de nefronas funcionantes y el
lesiones histológicas óseas que resultan de las alteracio-
efecto directo de la sobrecarga de fósforo en el túbulo
nes del metabolismo mineral en la ERC, y que incluyen:
proximal12. Otros mecanismos adicionales que contribu-
a) hiperparatiroidismo secundario, b) osteomalacia, c) en-
yen a la producción excesiva de PTH incluyen una re-
fermedad ósea adinámica y d) enfermedad mixta16.
ducción del número de receptores de vitamina D y delreceptor sensor de calcio en las paratiroides y una ma-
Aunque la osteodistrofia renal puede estar presente en
yor resistencia al efecto de PTH en el hueso debida a la
la mayoría de los pacientes con ERC avanzada, muy po-
disminución de sus receptores10,13.
cos tienen síntomas antes de empezar a recibir trata-miento con diálisis1,17-19.
El hiperparatiroidismo secundario tiende a mantener la cal-cemia al estimular la reabsorción subperióstica, la produc-
La osteodistrofia renal se puede prevenir o atenuar con un
ción renal de 1,25-dihidroxicolecalciferol y la reabsorción
control adecuado del calcio, fósforo y PTH desde etapas
tubular de calcio14. Aunque este mecanismo de compensa-
tempranas de la ERC20.
Excreción renal
Fósforo sérico
Absorción intestinal
Absorción intestinal
Reabsorción renal
Figura 1. Mecanismos de las alteraciones del metabolismo del calcio, fósforo y hormona paratiroidea en la enfermedad
renal crónica.
FGF-23: factor de crecimiento de fibroblastos 23; PTH: hormona paratiroidea.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 5
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
El hiperparatiroidismo secundario se caracteriza por un
1. EVALUACIÓN DE LAS ALTERACIONES BIOQUÍMICAS
recambio óseo acelerado, aumento del número y acti-vidad de los osteoclastos y osteoblastos e incremento
de la resorción ósea, lo que resulta en las típicas lesio-nes de osteítis fibrosa quística15.
1.1. Se recomienda medir los niveles séricos de calcio, fós-
foro, hormona paratiroidea intacta (PTHi) y fosfata-
Clínicamente se puede manifestar por dolor óseo, y en las
sa alcalina cuando la tasa de filtración glomerular
radiografías se puede observar reabsorción subperióstica,
(TFG) es < 60 ml/min (1C) (SLANH).
la cual es más evidente en el borde radial de las falangesmedias de los dedos índice y medio, en el extremo distal
1.2. La frecuencia de las mediciones de calcio, fósforo y
de las clavículas y en la sínfisis púbica. En casos graves
PTHi debe basarse en la presencia de las anormali-
pueden observarse quistes en los huesos largos o planos,
dades y en la velocidad de progresión de la ERC (ta-
así como lesiones escleróticas en la parte superior e infe-
bla 1). En aquellos pacientes que estén recibiendo
rior de las vértebras. También se pueden observar lesio-
tratamiento para TMO-ERC y en quienes se han de-
nes de «sal y pimienta» en el cráneo debido a la combi-
tectado alteraciones bioquímicas, es razonable hacer
nación de áreas de osteopenia y osteoesclerosis, aunque
mediciones más frecuentes para monitorizar las ten-
no son exclusivas del hiperparatiroidismo21,22.
dencias y evaluar la eficacia del tratamiento y los
efectos secundarios (sin grado)(SLANH).
La osteomalacia en la ERC 3-5D es rara actualmente; secaracteriza por bajo recambio óseo, disminución del nú-
1.3. En pacientes con ERC 3-5D se sugiere medir los ni-
mero de osteoblastos y osteoclastos, y aumento del volu-
veles séricos de 25-hidroxi-vitamina D [25(OH)D]
men de osteoide debido a un defecto en la mineraliza-
(calcidiol) y repetirlos dependiendo del valor basal
ción15,23. Clínicamente se puede manifestar por dolor óseo
y las intervenciones terapéuticas (2C). También se
y fracturas. Aunque la génesis de la osteomalacia en la
sugiere tratar la insuficiencia y la deficiencia de vi-
ERC 3-5 está relacionada a deficiencia de vitamina D,
tamina D de acuerdo a las estrategias recomenda-
la acumulación de aluminio en los huesos puede estar im-
das para la población general (2C)(KDIGO).
plicada cuando se utilizan quelantes de fósforo que con-tienen este elemento20,24.
1.4. Se recomienda que los médicos sean informados
de la metodología y los cambios en las técnicas,
La enfermedad ósea adinámica es otro tipo de osteodis-
tipo de muestra (plasma o suero) y procesamien-
trofia renal de bajo recambio óseo, pero, a diferencia de
to utilizado por los laboratorios en las determina-
la osteomalacia, no presenta acumulación de osteoide15.
ciones bioquímicas en los TMO-ERC 3-5D, a fin
Esta alteración ósea es una de las lesiones más frecuentes
de lograr una interpretación adecuada de los re-
en los estadios más tempranos de la ERC25; asimismo, es
más prevalente en diabéticos y en personas de edad avan-zada. Clínicamente se puede manifestar por hipercalce-mia, debido a la captación disminuida de calcio en el hue-
so, bajas concentraciones séricas de PTH y fosfatasaalcalina, así como por un mayor riesgo de fracturas y cal-
La detección de las alteraciones bioquímicas del metabolis-
mo mineral es esencial en el diagnóstico de TMO-ERC. Es-tas alteraciones suelen presentarse a partir del estadio 3 de
Otro componente de los TMO-ERC lo constituyen las cal-
la ERC. Por esta razón, se recomienda iniciar la determina-
cificaciones extraóseas, vasculares y no vasculares27,28. Las
ción de los niveles séricos de calcio, fósforo y PTHi a par-
calcificaciones arteriales suelen detectarse radiológicamen-
tir de dicho estadio. Sin embargo, la severidad y velocidad
te y pueden afectar cualquier arteria del organismo29,30.
de progresión de las alteraciones bioquímicas del metabo-lismo mineral es muy variable, por lo que la frecuencia de
Las calcificaciones cutáneas pueden manifestarse como pe-
medición debe estar guiada por la presencia, duración y
queñas máculas o pápulas de consistencia firme. Una forma
magnitud de las alteraciones encontradas, así como por el
rara pero especialmente grave es la calcifilaxis, que se carac-
grado y progresión de la ERC y el uso de medicamentos
teriza por calcificación de la capa media de las arterias, is-
para corregir las anomalías. Así, en un estudio con pacien-
quemia distal y desarrollo progresivo de necrosis y úlceras
tes incidentes en diálisis, los niveles séricos de calcio y fós-
en la piel de los dedos de los pies y manos, muslos, piernas
foro aumentaron durante los primeros seis meses de terapia
y tobillos31,32. Esta complicación, observada raramente en los
de reemplazo renal33.
estadios iniciales de la ERC, puede presentarse en ERCavanzada en fase de tratamiento sustitutivo; su patogénesis
Aunque existen numerosos reportes de estudios transver-
no es del todo conocida.
sales sobre niveles séricos de calcio, fósforo y PTHi en la
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 6
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla 1. Frecuencia sugerida de mediciones de calcio, fósforo y hormona paratiroidea intacta
Estadio de ERC
25(OH) vitamina D
a Depende del nivel basal de PTHi y la velocidad de progresión de la ERC. b Repetir la medición dependiendo del valor basal y lasintervenciones terapéuticas. Medir preferentemente al final del invierno si hay cambios estacionales. c Junto con medición de PTHi.
ERC: enfermedad renal crónica; PTHi: hormona paratiroidea intacta.
población con ERC 5D, el estudio DOPPS (Dialysis Out-
parámetros en TMO-ERC. El médico deberá ajustar la
comes and Practice Patterns Study) proporciona la mejor
frecuencia de aquellas según la magnitud de las anoma-
visión global de la prevalencia de trastornos del calcio
lías y la tasa de progresión de la ERC. La frecuencia de
(corregidos por albúmina) fósforo y PTH34. Desafortuna-
las mediciones debe ser individualizada para aquellos pa-
damente, no hay una estandarización global de los ensa-
cientes que reciben tratamiento para TMO-ERC con el fin
de monitorizar tanto los efectos benéficos del tratamientocomo los efectos secundarios.
Recientemente, los niveles elevados de fosfatasa alcalinatotal en suero se han reconocido como una posible varia-
En pacientes con ERC estadios 3-5D, se recomienda que
ble independiente asociada con un incremento en el ries-
las decisiones terapéuticas se basen en la tendencia y no
go relativo (RR) de mortalidad en pacientes con ERC es-
en un solo valor de laboratorio, tomando en considera-
tadio 5D35,36. Regidor et al.35 describieron una asociación
ción, además, todas las evaluaciones disponibles de
entre los niveles séricos de fosfatasa alcalina total y mor-
TMO-ERC (
1C).
talidad entre poblaciones prevalentes en hemodiálisis(HD), además de las curvas en U o J para el calcio, fósfo-
La interpretación de los valores bioquímicos y hormona-
ro y PTH, enfatizando aún más la complejidad de la rela-
les en el diagnóstico de TMO-ERC requiere del conoci-
ción entre estas anomalías de laboratorio con los resulta-
miento del tipo de ensayo y su precisión, variabilidad in-
dos, pero no existe evidencia de que una reducción de
terensayo, manejo de la muestra de sangre, así como de
estos niveles conduzca a mejores resultados.
las variaciones normales posprandiales, diurnas y estacio-nales. Es debido a estas variaciones en el ensayo que con-
Aunque las recomendaciones sobre la frecuencia de me-
sideramos que deberían usarse preferencialmente las ten-
dición del calcio, fósforo y PTHi están basadas en opi-
dencias encontradas en los valores de laboratorio y no los
nión, constituyen un marco general útil en la práctica clí-
valores individuales, con el fin de determinar cuándo se
nica. No existen datos que muestren que la determinación
debe iniciar y/o ajustar el tratamiento. La tabla 2 describe
rutinaria mejore los resultados clínicos en el paciente. No
el origen y magnitud de la variación en las mediciones sé-
obstante, se puede sugerir cuál puede ser la frecuencia ra-
ricas de calcio, fósforo, PTH y esteroles de vitamina D.
zonable para realizar mediciones de laboratorio de estos
Esta tabla sirve como una guía para los médicos y consti-
Tabla 2. Origen y magnitud de la variación en la medición sérica de calcio, fósforo, hormona paratiroidea intacta y
esteroles de vitamina D
Esteroles de vitamina D
Coeficiente de variación
Variación diurna
Variación estacional
Variación con las comidas
Variación con hora de diálisis
Validez del ensayo
PTH: hormona paratiroidea; +: mínima o baja; ++: moderada; +++: alta o buena; - : No hay variación; espacio en blanco: no se analizó.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 7
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
tuye la base de la recomendación de que las pruebas de
corregido. Desafortunadamente, las mediciones de calcio
laboratorio deberían medirse usando los mismos ensayos
ionizado no están disponibles de forma rutinaria y, en al-
y en horas similares del día o la semana para un paciente
gunos casos, podrían requerir costos adicionales para las
dado. Los proveedores de salud deberán familiarizarse
con los problemas del ensayo y sus limitaciones. Esta va-riabilidad enfatiza la importancia de utilizar las tenden-
Fósforo: El fósforo inorgánico es crítico para numerosas
cias, en lugar de valores absolutos únicos, cuando se to-
funciones fisiológicas normales, incluyendo desarrollo es-
man decisiones sobre el diagnóstico o tratamiento.
quelético, metabolismo mineral, contenido y función delos fosfolípidos en la membrana celular, comunicación ce-
Calcio: Los niveles séricos de calcio se miden rutinaria-
lular, agregación de plaquetas y transferencia de energía
mente en los laboratorios clínicos en equipos automatiza-
a través del metabolismo mitocondrial. Debido a su im-
dos usando métodos colorimétricos y estándares de con-
portancia, el organismo mantiene las concentraciones sé-
trol de calidad. De esta manera, el ensayo es generalmente
ricas entre 2,5-4,5 mg/dl (0,81-1,45 mmol/l). Los térmi-
preciso y reproducible. En individuos sanos, el calcio sé-
nos fósforo y fosfato se usan con frecuencia de manera
rico está rígidamente controlado dentro de un rango estre-
indistinta, pero, estrictamente hablando, el término fosfa-
cho, por lo general 8,5-10,0 o 10,5 mg/dl (2,1-2,5 o 2,6
to significa la suma de dos iones inorgánicos que existen
mmol/l), con algunas, aunque mínimas, variaciones diur-
fisiológicamente en el suero y en otros fluidos corporales:
nas37. Sin embargo, el rango normal puede variar ligera-
el hidrógeno fosfato y el dihidrógeno fosfato. Sin embar-
mente entre laboratorios, dependiendo del tipo de medi-
go, la mayor parte de los laboratorios reporta como fósfo-
ciones utilizadas. En pacientes con ERC, los niveles
ro este componente inorgánico medible. A diferencia del
séricos de calcio tienen más fluctuación debido a la alte-
calcio, un componente importante del fósforo es intrace-
ración de la homeostasis y terapias concomitantes. En
lular, y factores como el pH y la glucosa pueden causar
aquellos pacientes con ERC estadio 5D, existen fluctua-
desplazamientos de iones fosfatos hacia adentro y afuera
ciones adicionales asociadas con cambios inducidos por
de las células, y como consecuencia pueden alterar la con-
la diálisis, la hemoconcentración y la subsiguiente hemo-
centración sérica sin por ello cambiar el fósforo corporal
dilución. Igualmente, existen variaciones de acuerdo al
día en que se toma la muestra; así, los días lunes o martesque constituyen el primer día de diálisis de la semana,
El fósforo se mide rutinariamente en laboratorios clíni-
muestran valores de calcio superiores (0,01 mg/dl) que las
cos en equipos automatizados usando métodos colorimé-
medidas en las sesiones en miércoles o jueves34. En con-
tricos y estándares de control de calidad. De esta mane-
secuencia, es importante enfatizar que las determinacio-
ra, el ensayo es, generalmente, preciso y reproducible.
nes bioquímicas en estos pacientes deben hacerse prediá-
La hemólisis durante la recolección de la muestra pro-
lisis a mitad de semana (
opinión).
duce niveles falsamente elevados de fósforo. En indivi-duos sanos, existe una variación diurna, tanto en los ni-
La concentración de calcio sérico refleja pobremente el
veles séricos como en la excreción urinaria de fósforo.
calcio corporal total. El compartimiento extracelular solo
El fósforo sérico alcanza un nivel bajo en las primeras
contiene el 1 % del calcio corporal total; el restante se al-
horas de la mañana, aumenta hasta una meseta a las
macena en los huesos. El calcio sérico ionizado, general-
16:00 horas e incrementa aún más hasta un valor pico
mente 40-50 % del calcio sérico total, es fisiológicamen-
entre las 01:00 y 03:00 horas39,40. Sin embargo, en un es-
te activo, mientras que el calcio no ionizado está enlazado
tudio en pacientes con ERC 5D no se encontró variación
a la albúmina o aniones como el citrato, bicarbonato y fos-
diurna de fósforo cuando se estudiaron en un día que no
fato, siendo por ello fisiológicamente inactivo. En presen-
recibieron diálisis41. Generalmente, los niveles son más
cia de hipoalbuminemia hay un incremento en el calcio
elevados después de un largo período de diálisis. En el
ionizado con relación al calcio total; debido a esto el cal-
estudio DOPPS, las muestras de pacientes en HD que se
cio sérico total podría subestimar el calcio sérico (ioniza-
recogieron inmediatamente antes de las sesiones de lu-
do) fisiológicamente activo. Comúnmente se usa una fór-
nes o martes fueron más elevadas que las de sesiones de
mula para estimar el calcio ionizado en el calcio sérico
miércoles o jueves por 0,08 mg/dl (0,025 mmol/l). De
total que consiste en añadir 0,8 mg/dl (0,2 mmol/l) por
manera que la determinación del fósforo es generalmen-
cada gramo de disminución de la albúmina sérica por de-
te válida y reproducible, pero podría verse afectada por
bajo de 4 g/dl (40 g/l). Esta fórmula para el «calcio corre-
variaciones diurnas normales y posprandiales. Una vez
gido» se usa rutinariamente en muchos centros y en mu-
más, las tendencias a aumento o disminución progresiva
chos ensayos clínicos. Desafortunadamente, algunos
podrían ser más exactas que pequeñas variaciones en los
datos recientes muestran que este método no es mejor que
el calcio total y es menos específico que las medicionesde calcio ionizado38. De forma adicional, el ensayo que se
Fosfatasa alcalina: Las fosfatasas alcalinas son enzimas
usa para la albúmina podría afectar la medición de calcio
que digieren el fosfato de las proteínas y de los nucleóti-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 8
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
dos, y tienen un funcionamiento óptimo en un pH alcali-
tasis mineral y en la función músculo-esquelética. Ade-
no. La medición del nivel de fosfatasa alcalina total es un
más, se han descrito efectos moduladores de la función
ensayo colorimétrico que se realiza rutinariamente en los
endotelial e inmunológica y en la regulación del ciclo ce-
laboratorios clínicos en equipos automatizados, usando
lular, entre otros efectos pleiotrópicos.
estándares de control de calidad. La enzima se encuentraen el cuerpo en forma de isoenzimas que son característi-
En los pacientes con ERC hay una disminución en la ac-
cas del tejido de origen. Las concentraciones más eleva-
tividad de la 1-α-hidroxilasa renal con la consiguiente re-
das se encuentran en el hígado y los huesos, pero también
ducción en los niveles séricos de calcitriol, lo cual contri-
se encuentra en los intestinos, la placenta, los riñones y
buye a la hipocalcemia que puede acompañar a esta
los leucocitos. La isoenzima fosfatasa alcalina específica
enfermedad. La deficiencia de calcitriol favorece el de-
para identificar el tejido de donde se origina puede deter-
sarrollo de hiperparatiroidismo secundario, ya que esta
minarse por fraccionamiento e inactivación por calor,
hormona regula la producción y liberación de PTH a tra-
pero no hay gran disponibilidad de estos procedimientos
vés de receptores específicos.
en los laboratorios clínicos. La fosfatasa alcalina especí-fica del hueso se mide con un ensayo inmunorradiométri-
La mayoría de los estudios considera como deficiencia
co; sus niveles elevados se deben generalmente a una fun-
una concentración sérica de 25(OH)D menor de 15 ng/ml
ción anormal del hígado (en cuyo caso, también otras
y como insuficiencia los niveles entre 15 y 30 ng/ml. Sin
pruebas son anormales), una elevada actividad ósea o me-
embargo, no existe consenso respecto a la definición de
tástasis óseas. Los niveles son normalmente más elevados
niveles «adecuados» y «tóxicos» de vitamina D. La defi-
en niños, con huesos en crecimiento, que en los adultos.
ciencia de 25(OH)D ha sido asociada con mayor riesgo demortalidad en pacientes con ERC43,44 y es uno de los fac-
Es conveniente que los laboratorios reporten el método
tores que intervienen en la patogénesis del hiperparatiroi-
utilizado, así como cualquier cambio en este, en el tipo de
dismo secundario. Sin embargo, no se ha comprobado que
muestra analizada (plasma o suero) o en los requerimien-
el tratamiento con vitamina D hasta lograr una concentra-
tos de manejo de la muestra, pues la correcta interpreta-
ción sérica determinada disminuya la mortalidad, ni se
ción de los resultados requiere el conocimiento de dichas
han establecido las cifras óptimas de esta. A pesar de que
variables, así como de las fluctuaciones normales de los
el beneficio de la corrección de las concentraciones séri-
parámetros que se evalúan. Por ejemplo, las determina-
cas de 25(OH)D no se ha demostrado, consideramos que
ciones de PTHi por distintos ensayos detectan en forma
la medición de vitamina D en los pacientes con estadios
diferente el fragmento 7-84 de la PTH, por lo que la me-
3-5 de ERC puede ser útil45,46 (tabla 3).
dición de esta hormona por dos ensayos diferentes puededar distintos resultados aun en una misma muestra42.
2. EVALUACIÓN DE LAS ALTERACIONES ÓSEAS
Vitamina D: El término vitamina D representa tanto a la
vitamina D (ergocalciferol) como a la vitamina D (cole-
calciferol). El ergocalciferol es sintetizado en las plantasa partir del ergosterol y, junto con el colecalciferol del
2.1. El método diagnóstico más preciso para determinar
aceite de pescado, es una fuente dietética de vitamina D
el tipo de enfermedad ósea asociada a la ERC (osteo-
para los humanos. Sin embargo, el 90 % de los requeri-
distrofia renal) es la biopsia ósea con análisis histo-
mientos de vitamina D provienen de la conversión de
7-dehidrocolesterol a colecalciferol, mediante una reac-ción catalizada por la luz solar en la piel. Tanto la vitami-
2.2. Es razonable realizar una biopsia ósea en pacientes
na D como la D sufren una hidroxilación en el hígado
con estadios 3-5D de ERC en ciertas situaciones, en-
para convertirse en 25(OH)D, y posteriormente en el ri-
tre las que se incluyen (sin grado)(
SLANH):
ñón para transformarse en 1,25(OH) D o calcitriol, la for-
Fracturas o dolor óseo sin causa aparente.
ma más activa de la vitamina D. El calcitriol (hormona)
Sospecha de enfermedad ósea asociada al aluminio.
de la vitamina D juega un papel importante en la homeos-
Sospecha de osteomalacia.
Tabla 3. Niveles de vitamina D en suero y dosis sugeridas de tratamiento
Concentración de 25(OH)D
< 5 ng/ml
5-15 ng/ml
16-30 ng/ml
Dosis de ergocalciferol
50.000 UI por semana
50.000 UI por semana
50.000 UI por mes
durante 12 semanas;
durante 4 semanas;
luego, 50.000 UI por mes
luego, 50.000 UI por mes
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 9
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Hipercalcemia o hipofosfatemia no explicadas.
distrofia renal, por lo que debe considerarse su realiza-
Antes de comenzar tratamiento con bisfosfonatos.
ción en aquellos pacientes con síntomas óseos o anoma-
Antes de paratiroidectomía.
lías bioquímicas sin una etiología clara. También se re-comienda en quienes se sospeche enfermedad ósea por
2.3. En pacientes con ERC 3-5D con evidencia de TMO-
aluminio, osteomalacia y previo al inicio de tratamien-
ERC, se sugiere que no se realicen rutinariamente las
to con bisfosfonatos, ya que estos fármacos pueden
pruebas para determinación de la densidad mineral
agravar la enfermedad de bajo recambio.
ósea (DMO), debido a que no predicen los riesgos de
fractura como en la población general y, por otra par-
La biopsia de hueso permite evaluar la calidad ósea y el
te, no permiten predecir el tipo de osteodistrofia renal
tipo de alteración predominante, de acuerdo a la fisiopato-
logía (osteítis fibrosa, osteomalacia, enfermedad ósea adi-námica y enfermedad mixta). Los parámetros que permiten
2.4. En pacientes con ERC estadios 3-5D, se sugiere utili-
dicha clasificación son: recambio óseo, mineralización y
zar las mediciones de PTH sérica o de la fosfatasa al-
volumen. Sin embargo, los diferentes tipos de osteodistro-
calina específica del hueso para la evaluación de en-
fia renal guardan poca relación con las repercusiones clíni-
fermedad ósea debido a que valores marcadamente
cas, con el riesgo de fracturas y calcificación arterial47,48. El
altos o bajos permiten predecir el recambio óseo sub-
volumen es otro de los parámetros evaluados en la biopsia
ósea y, aunque no forma parte de la clasificación tradicio-nal de la osteodistrofia renal, se ha determinado que cons-
2.5. En pacientes con ERC estadios 3-5D, se sugiere no me-
tituye una variable que influye de manera independiente en
dir rutinariamente los marcadores específicos de re-
la fragilidad ósea. Por lo tanto, el volumen óseo ha sido in-
cambio óseo basados en la síntesis de colágeno (como el
cluido dentro de los nuevos parámetros de la clasificación
propéptido C-terminal de procolágeno tipo I) y su cata-
TMV (recambio, mineralización y volumen, por sus siglas
bolismo (tales como el telopéptido de colágeno tipo I, pi-
en inglés) sugeridos por KDIGO.
La forma más precisa de determinar la tasa de formación
2.6. En pacientes con ERC 3-5D, la medición de PTHi y
ósea, y por tanto el recambio, es el doble marcaje con te-
fosfatasa alcalina no ha demostrado consistentemente
traciclina, el cual permite también calcular el tiempo de
una correlación con los cambios histológicos de la os-
mineralización del osteoide (el segundo parámetro utili-
zado para clasificar los distintos tipos de osteodistrofiarenal) (tabla 6). En América Latina existen pocos labora-
2.7. Se sugiere detectar la acidosis metabólica y even-
torios con capacidad para realizar estudios histomorfo-
tualmente corregirla para evitar la pérdida de
métricos de biopsias óseas. Hoy en día, estos están limi-
masa ósea y muscular en el paciente con ERC 3-5
tados a Brasil (Universidad del Estado de Sao Paulo y
Universidad Federal de Sao Paulo) y Venezuela (Hospi-tal Universitario de Caracas).
La capacidad de la DMO para predecir el riesgo de frac-turas o el tipo de osteodistrofia renal en pacientes con
Los pacientes con ERC 3-5D tienen mayor frecuencia y riesgo
ERC 4-5D es débil e inconsistente49-52. Por esto, no se su-
de fracturas en comparación con la población general (tablas 4
giere realizar este estudio en forma rutinaria a los pacien-
y 5) y se asocian con un aumento en la morbimortalidad.
tes que tengan evidencia de TMO-ERC.
Los principales métodos que se han utilizado para el es-
La PTH juega un papel esencial en la fisiopatología de
tudio de la enfermedad ósea asociada a la ERC son la
los TMO-ERC por su efecto en la regulación del fósforo
biopsia ósea y la densitometría ósea. Los marcadores bio-
y el remodelado óseo. La fosfatasa alcalina total es un
químicos de formación y resorción ósea constituyen otros
indicador que refleja actividad osteoblástica si no hay al-
indicadores potenciales de dichas alteraciones.
teración hepática. Los niveles séricos anormales de es-tos dos indicadores guardan relación, aunque débil, con
La fragilidad ósea puede ser secundaria a alteraciones de
el grado de recambio óseo, riesgo de fracturas y otros
la masa y/o de la calidad del hueso. Los distintos tipos
eventos clínicos, incluyendo la mortalidad53-55. Aunque la
de osteodistrofia renal pueden estar asociados con cual-
biopsia de hueso sigue siendo el estándar de oro para el
quiera de estas alteraciones.
diagnóstico del tipo de osteodistrofia renal, no es fácil-mente accesible para la mayoría de los pacientes; la de-
El análisis histomorfométrico de una biopsia ósea cons-
terminación de PTHi fosfatasa alcalina total u ósea pue-
tituye el estándar de oro para el diagnóstico de la osteo-
de ser utilizada para estimar el recambio óseo50,56-58.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 10
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla 4. Fracturas en pacientes con enfermedad renal crónica estadio 3-4
cadera en ERC
EE. UU. adultos.
Población alemana Transversal
veteranos > 50
ERC: enfermedad renal crónica; OP: osteoporosis; TFGe: tasa de filtración glomerular estimada; WHI: Women's Health Initiative.
Nickolas TL, McMahon DJ, Shane EJ. Relationship between moderate to severe kidney disease and hip fracture in the United
States. Am Soc Nephrol 2006;17:3223-32.
Dukas L, Schacht E, Stähelin HB. In elderly men and women treated for osteoporosis a low creatinine clearance of <65 ml/min is a
risk factor for falls and fractures. Osteoporos Int 2005;16:1683-90.
Ensrud KE, Lui LY, Taylor BC, Ishani A, Shlipak MG, Stone KL, et al. Renal function and risk of hip and vertebral fractures in older
women; Osteoporotic Fractures Research Group. Arch Intern Med. 2007;22;167:133-9.
Fried LF, Biggs ML, Shlipak MG, Seliger S, Kestenbaum B, Stehman-Breen C, et al. Association of kidney function with incident hip
fracture in older adults. Am Soc Nephrol 2007;18:282-6.
Jassal SK, von Muhlen D, Barrett-Connor EJ. Measures of renal function, BMD, bone loss, and osteoporotic fracture in older
adults: the Rancho Bernardo study. J Bone Miner Res 2007;22:203-10.
Dooley AC, Weiss NS, Kestenbaum B. Increased risk of hip fracture among men with CKD. Am J Kidney Dis 2008;51:38-44.
LaCroix AZ, Lee JS, Wu L, Cauley JA, Shlipak MG, Ott SM, et al.; Women's Health Initiative Observational. Cystatin-C, Renal
function, and incidence of hip fracture in postmenopausal women; Women's Health Initiative Observational. J Am Geriatr Soc
Otros marcadores de recambio óseo basados en la
can que estos y otros marcadores bioquímicos no
síntesis de colágeno (propéptido C-terminal de pro-
aportan mayor información que la PTH o la fosfatasa
colágeno tipo 1) o en su catabolismo (como el telo-
alcalina total para predecir los hallazgos en la biop-
péptido de colágeno tipo 1, piridinolina o desoxipiri-
sia de hueso o los eventos clínicos. Por lo tanto, ac-
dinolina) no han sido evaluados de manera extensa en
tualmente no se recomienda su uso en la evaluación
pacientes con ERC 3-5. Los estudios existentes indi-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 11
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla 5. Fracturas en pacientes con enfermedad renal crónica estadio 5D
Autor, año
Cualquier fractura Cadera Columna
Cualquier fractura Cadera Columna
Stehman-Breen, 4.952
101.039 USRDS en lista Tx
Mitterbauer, 2007
DOPPS: Dialysis Outcomes and Practice Patterns Study; DP: diálisis peritoneal; HD: hemodiálisis; N: número de pacientes; Tx: trasplante; USRDS: United States Renal Data System.
Pendras JP, Erickson RV. Hemodialysis: a successful therapy for chronic uremia. Ann Intern Med 1966;64:293-311.
Rubini ME, Cobun JW, Massry SG, Shinaberger JH. Renal osteodystrophy; some therapeutic consideration relative to long-term dialysis and transplantation. Arch Intern Med1969;124:663-9.
Parfitt AM, Massry SG, Winfield AC. Osteopenia and fractures occurring during maintenance hemodialysis. A new form of renal osteodystrophy. Clin Orthop Relat Res1972;87:287-302.
Piraino B, Chen T, Cooperstein L, Segre G, Puschett J. Fractures and vertebral bone mineral density in patients with renal osteodystrophy. Clin Nephrol 1988;2:57-62.
Yamaguchi T, Kanno E, Tsubota J, Shiomi T, Nakai M, Hattori S, et al. Retrospective study on the usefulness of radius and lumbar bone density in the separation ofhemodialysis patients with fractures from those without fractures. Bone 1996;19:549-55.
Atsumi K, Kushida K, Yamazaki K, Shimizu S, Ohmura A, Inoue T. Risk factors for vertebral fractures in renal osteodystrophy. Am J Kidney Dis 1999;33:287-93.
Gerakis A, Hadjidakis D, Kokkinakis E, Apostolou T, Raptis S, Billis A, et al. Correlation of bone mineral density with the histological findings of renal osteodystrophy inpatients on hemodialysis. J Nephrol 2000;13:437-43.
Alem AM, Sherrard DJ, Gillen DL, Weiss NS, Beresford SA, Heckbert SR, et al. Increased risk of hip fracture among patients with end-stage renal disease. Kidney Int2000;58:396-9.
Coco M, Rush H. Increased incidence of hip fractures in dialysis patients with low serum parathyroid hormone. Am J Kidney Dis 2000;36:1115-21.
Stehman-Breen CO, Sherrard DJ, Alem AM, Gillen DL, Heckbert SR, Wong CS, et al. Risk factors for hip fracture among patients with end-stage renal disease. Kidney Int2000;58:2200-5.
Ball AM, Gillen DL, Sherrard D, Weiss NS, Emerson SS, Seliger SL, et al. Risk of hip fracture among dialysis and renal transplant recipients. J Am Med Assoc2002;288:3014-8.
Jamal SA, Chase C, Goh YI, Richardson R, Hawker GA. Bone density and heel ultrasound testing do not identify patients with dialysis-dependent renal failure who havehad fractures. Am J Kidney Dis 2002;39:843-9.
Kaji H, Suzuki M, Yano S, Sugimoto T, Chihara K, Hattori S, et al. Risk factors for hip fracture in hemodialysis patients. Am J Nephrol 2002;22:325-31.
Ureña P, Bernard-Poenaru O, Ostertag A, Baudoin C, Cohen-Solal M, Cantor T, et al. Bone mineral density, biochemical markers and skeletal fractures in haemodialysispatients. Nephrol Dial Transplant 2003;18:2325-31.
Block GA, Klassen PS, Lazarus JM, Ofsthun N, Lowrie EG, Chertow GM. Mineral metabolism, mortality, and morbidity in maintenance hemodialysis. Am Soc Nephrol2004;15:2208-18.
Inaba M, Okuno S, Kumeda Y, Yamakawa T, Ishimura E, Nishizawa Y. Increased incidence of vertebral fracture in older female hemodialyzed patients with type 2diabetes mellitus. Calcif Tissue Int 2005;76:256-60.
Danese MD, Kim J, Doan QV, Dylan M, Griffiths R, Chertow GM. PTH and the risks for hip, vertebral, and pelvic fractures among patients on dialysis. Am J Kidney Dis2006;47:149-56.
Elder GJ, Mackun KJ. 25-Hydroxyvitamin D deficiency and diabetes predict reduced BMD in patients with chronic kidney disease. Bone Miner Res 2006;21:1778-84.
Ersoy FF, Passadakis SP, Tam P, Memmos ED, Katopodis PK, Ozener C, et al. Bone mineral density and its correlation with clinical and laboratory factors in chronicperitoneal dialysis patients. J Bone Miner Metab 2006;24:79-86.
Jadoul M, Albert JM, Akiba T, Akizawa T, Arab L, Bragg-Gresham JL, et al. Incidence and risk factors for hip or other bone fractures among hemodialysis patients in theDialysis Outcomes and Practice Patterns Study. Kidney Int 2006;70:1358-66.
Jamal SA, Gilbert J, Gordon C, Bauer DC. Cortical pQCT measures are associated with fractures in dialysis patients. J Bone Miner Res 2006;21:543-8.
Kaneko TM, Foley RN, Gilbertson DT, Collins AJ. Clinical epidemiology of long-bone fractures in patients receiving hemodialysis. Clin Orthop Relat Res 2007;457:188-93.
Mitterbauer C, Kramar R, Oberbauer R. Age and sex are sufficient for predicting fractures occurring within 1 year of hemodialysis treatment. Bone 2007;40:516-21.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 12
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla 6. Características de la biopsia ósea en los diferentes tipos de osteodistrofia renal
Ostetitis fibrosa
Enfermedad ósea adinámica
Enfermedad ósea mixta
3. EVALUACIÓN DE LAS CALCIFICACIONES
nes predice fuertemente la morbilidad y mortalidad de
etiología cardiovascular en los sujetos con ERC. La evi-dencia de ensayos clínicos aleatorizados respecto al im-
pacto de las intervenciones para reducir la progresión delas calcificaciones vasculares sobre la mortalidad es aún
3.1. En pacientes con ERC 3-5D se sugiere realizar una ra-
limitada. Por todo esto, aunque actualmente no se puede
diografía lateral de abdomen para detectar la presen-
recomendar el tamizaje para la detección de calcificacio-
cia de calcificaciones vasculares. El ecocardiograma
nes cardiovasculares en todos los sujetos con ERC de ma-
también pudiera ser utilizado para detectar calcifica-
nera indiscriminada, pudiera estar justificado en aquellos
ciones valvulares. Estos métodos diagnósticos pueden
pacientes con hiperfosfatemia significativa, los que reci-
ser alternativas razonables a otros métodos más com-
ben quelantes de fósforo a base de calcio en dosis altas,
plejos que pudieran no estar disponibles, tales como
en pacientes en lista de espera para trasplante renal o en
la tomografía axial computada (TAC) o la tomografía
otros casos a juicio del médico.
de emisión de electrones (EBCT) (2C)(KDIGO). Es razo-
nable usar esta información para decidir el trata-
Finalmente, una forma poco frecuente pero muy severa de cal-
miento de TMO-ERC (sin grado)(
SLANH).
cificación de la capa media de pequeñas arterias (cutáneas) esla calcifilaxis, llamada también arteriopatía urémica. Esta
3.2. Se sugiere que los pacientes con ERC 3-5D con calci-
complicación está fuertemente asociada (en aproximada-
ficaciones vasculares o valvulares sean considerados
mente un tercio de los casos) con alteraciones del metabo-
de alto riesgo cardiovascular (2A)(KDIGO).
lismo mineral relacionadas con ERC, incluyendo, en un ter-cio de los casos, el hiperparatiroidismo secundario. Secaracteriza por ulceraciones isquémicas de la piel, muy do-
lorosas, seguida de superinfecciones. Esta alteración se aso-cia con una alta mortalidad. Los inhibidores de calcificación
Las calcificaciones cardiovasculares pueden ocurrir en la
(fetuina-A y proteína Gla de la matriz ósea) se han implica-
capa íntima o media de las arterias, así como en las válvu-
do en la patogénesis de la calcifilaxis, pero, debido a la re-
las cardíacas, con diversas consecuencias que incluyen:
lativamente baja incidencia de la enfermedad, no existen da-
cardiopatía isquémica, accidente vascular cerebral, disfun-
tos concluyentes disponibles que nos permitan comentar
ción valvular, hipertrofia y disfunción ventricular izquier-
sobre la naturaleza del proceso y opciones de tratamiento.
da. En la población general, la magnitud de la calcifica-ción coronaria, determinada por tomografía computada
Se ha señalado que el tratamiento con estatinas tiene un
multicorte o EBCT, tiene un alto valor predictivo del ries-
impacto beneficioso en el perfil aterogénico, la progresión
go de eventos cardiovasculares59,60. En los pacientes con
del ateroma y eventos cardiovasculares en pacientes sin
ERC, la calcificación cardiovascular generalizada es mu-
ERC66-68. En pacientes con ERC, no existen datos sobre los
cho más prevalente, más severa y sigue un curso más ace-
efectos de las estatinas en la calcificación arterial compa-
lerado, en comparación con la población general61,62.
rados con los de placebo. Aún más, el estudio 4D69 (DieDutch Diabetes Dialysis Study) con atorvastatina y el es-
El estándar de oro para la detección de calcificaciones
tudio AURORA70 (A Study to Evaluate the Use of Rosu-
cardiovasculares, tanto en la población general como en
vastatin in Subjects On Regular Haemodialysis) con ro-
los pacientes con ERC, es el índice de calcificación coro-
suvastatina no pudieron demostrar el beneficio del
naria basado en la TAC. Sin embargo, otros estudios más
tratamiento con dichas drogas en el punto final primario
fácilmente accesibles, como la radiografía lateral de ab-
de muerte por causas cardiovasculares, infartos al miocar-
domen, la medición de la velocidad de onda de pulso y la
dio no-fatales o accidentes cerebrovasculares, tanto en pa-
ecocardiografía, pueden proporcionar información com-
cientes diabéticos como no diabéticos sometidos a hemo-
parable63-65. La presencia y severidad de las calcificacio-
diálisis crónica. Recientemente, un estudio con ezetimiba
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 13
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
y simvastatina combinados mostró una reducción en el
triol o análogos de la vitamina D en presencia de
colesterol LDL y en la incidencia de eventos ateroscleró-
hipercalcemia persistente o recurrente (1B)(KDIGO).
ticos severos en pacientes con ERC avanzada, seguidospor un período promedio de 4,9 años71. Sin embargo, la
4.8. En pacientes con ERC estadios 3-5D e hiperfosfa-
Food and Drug Administration de Estados Unidos
temia, se sugiere restringir la dosis de quelantes de
(FDA)72 no aprobó una nueva indicación de estas dos dro-
fosfato a base de calcio en presencia de calcifica-
gas para enfermedad renal avanzada, ya que el estudio no
ción arterial (2C) y/o enfermedad ósea dinámica
fue diseñado para determinar el efecto de los dos medica-
(2C) y/o si los niveles séricos de PTHi son persis-
mentos por separado.
4.9. En pacientes con ERC estadio 5D, se sugiere incre-
4. TRATAMIENTO DE LOS TMO-ERC
mentar la eliminación de fósforo través de la diá-
lisis en el tratamiento de hiperfosfatemia persis-
Tratamiento dirigido a controlar las concentraciones
séricas de fósforo y calcio
4.1. Se recomienda que las decisiones terapéuticas se
basen en tendencias, más que en resultados indivi-
4.10. Los quelantes de fósforo que contienen calcio
duales de laboratorio, y que se considere de mane-
son efectivos para disminuir las concentraciones
ra conjunta toda la información disponible de las
séricas de fósforo. Sin embargo, su uso puede
alteraciones del metabolismo óseo y mineral aso-
asociarse con hipercalcemia y con una mayor in-
ciadas a la ERC (1C)(KDIGO).
cidencia de calcificación vascular (2C)(SLANH).
4.2. Se recomienda que las decisiones terapéuticas de
4.11. Se recomienda restringir la dosis de quelantes de
TMO-ERC se basen en las concentraciones séricas
fósforo que contienen calcio hasta un máximo
de calcio y fósforo consideradas individualmente,
de 1.500 mg de calcio elemental/día (1B)(SLANH).
en vez del producto calcio x fósforo (Ca x P)
También se recomienda restringir o evitar el uso
de quelantes de fósforo con calcio en presencia de
hipercalcemia, calcificaciones vasculares, enfer-
4.3. En pacientes con ERC 3-5D, se recomienda que las
medad ósea adinámica o niveles persistentemen-
concentraciones séricas de calcio (ionizado o total
te bajos de PTHi (2C)(KDIGO).
corregido) se mantengan dentro del rango normal
para el método utilizado (2C)(KDIGO).
4.12. Los quelantes de fósforo que contienen aluminio
no deberían usarse (1C)(SLANH).
4.4. En pacientes con ERC estadios 3-5, se sugiere
mantener el fósforo sérico en el rango normal
4.13. En pacientes con ERC 3-5 con fósforo sérico
(2C). En pacientes con ERC estadio 5D, se sugiere
normal o elevado, sugerimos no exceder la inges-
disminuir los niveles elevados de fósforo hacia el
ta de fósforo en la dieta de 800-1.000 mg/día, de
forma aislada o en combinación con otros trata-
mientos (2D)(SLANH).
4.5. En pacientes con ERC estadio 5D, se sugiere usar una
concentración de calcio en el líquido de hemodiálisis
Tratamiento de las concentraciones séricas anormales
entre 1,25 y 1,50 mmol/l (2,5 y 3,0 mEq/l) (2D)(KDIGO).
4.6. En pacientes con ERC estadios 3-5 (2D) y 5D (2B),
4.14. Se desconoce el nivel óptimo de PTHi en pacien-
se sugiere usar quelantes de fosfato para el trata-
tes con ERC 3-5. No obstante, sugerimos que
miento de la hiperfosfatemia. Es razonable que la
aquellos pacientes con niveles de PTHi por enci-
selección del quelante de fosfato tenga en conside-
ma de lo normal para el ensayo empleado sean
ración el estadio de la ERC, la presencia de otros
evaluados para determinar la presencia de hi-
componentes de TMO-ERC, terapias concomitan-
perfosfatemia, hipocalcemia y valores bajos (de-
tes y perfil de efectos secundarios (sin grado)(KDIGO).
ficiencia) de 25(OH)D (2C)(KDIGO). Si están presen-
tes, es razonable corregir estas anormalidades
4.7. En pacientes con ERC estadios 3-5D e hiperfosfa-
con una dieta baja en fósforo, quelantes de fós-
temia, se recomienda restringir la dosis de quelan-
foro, suplementos de calcio y/o vitamina D (sin
tes de fosfato a base de calcio y/o la dosis de calci-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 14
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
4.15. En pacientes con ERC 3-5D que muestren un in-
cremento progresivo y sostenido de los niveles de
PTHi por encima del límite superior del ensayo
empleado, a pesar de la corrección de factores
arriba mencionados, sugerimos iniciar trata-
La medición de los parámetros bioquímicos y hormonales
miento con calcitriol o análogos de la vitamina
que guían el manejo de los TMO-ERC está sujeta a varia-
ciones dependientes del tipo de ensayo, así como del ma-nejo y momento de toma de la muestra (fluctuación circa-
4.16. En pacientes con ERC 5D, sugerimos mantener
diana, posprandial, estacional o posdialítica). En
los niveles de PTHi en un rango aproximado de
consecuencia, se recomienda basar las decisiones terapéu-
entre 2 y 9 veces el límite superior normal del
ticas en tendencias más que en valores únicos de dichas
determinaciones, las cuales deben realizarse idealmentecon el mismo método de laboratorio y a la misma hora del
4.17. En pacientes con ERC 5D que presenten cam-
día para un paciente determinado73.
bios importantes en los niveles de PTHi en am-
bas direcciones (superior e inferior) dentro del
En cuanto al producto Ca x P, actualmente se considera que
rango sugerido (2 a 9 veces el límite superior
su utilidad es limitada en la práctica clínica, pues su valor
normal del ensayo), se sugiere el inicio o un cam-
es determinado principalmente por el fósforo sérico y por
bio en la terapia para evitar la progresión de las
lo general no brinda información adicional a la proporcio-
alteraciones hacia niveles fuera de este rango
nada por los valores individuales de sus dos componentes.
Además, existen múltiples situaciones en las que un pro-ducto Ca x P normal se asocia con eventos clínicos adver-
4.18. En aquellos pacientes con ERC 5D que presenten
sos y viceversa74,75.
una elevación o un incremento progresivo de la
PTHi sérica, sugerimos iniciar el uso de calci-
El uso del calcio sérico total tiene ciertas limitaciones desde
triol, análogos de vitamina D, calcimiméticos o la
el punto de vista clínico, particularmente en aquellos pacien-
combinación de estos dos grupos de agentes con
tes con una disminución en la concentración de albúmina sé-
el fin de reducir los niveles de PTHi (2B)(KDIGO).
rica. A un pH fisiológico, la albúmina se une aproximadamen-
Es razonable que la selección inicial del fármaco
te al 45 % del calcio total. Por lo tanto, las variaciones de la
para el control de la PTHi elevada esté basada en las
concentración de albúmina alteran la concentración del cal-
concentraciones séricas de calcio y fósforo, así como
cio sérico total, aun cuando el calcio ionizado permanezca
otros aspectos de la TMO-ERC (sin grado)(KDIGO).
inalterable. Por tales motivos, se han desarrollado algunas
Es razonable que las dosis de los quelantes de fós-
fórmulas para corregir los valores de calcio sérico de acuer-
foro, cálcicos y no cálcicos, sean ajustadas de ma-
do a las concentraciones de albúmina a fin de hacer un esti-
nera que no comprometan las concentraciones sé-
mado de la concentración de dicho elemento en los pacientes
ricas normales de fósforo y calcio (sin grado)(KDIGO).
con hipoalbuminemia. Sin embargo, cambios en las técnicas
Se recomienda que, en aquellos pacientes con hi-
de laboratorio para medir la albúmina con bromocresol púr-
o hiperfosfatemia pura (ahora en uso en muchos laboratorios) han cuestionado
(2D)(KDIGO), el uso de calcitriol y/o análogos de vi-
la utilidad de hacer correcciones del calcio sérico total por la
tamina D sea reducido u omitido.
concentración de albúmina76. Más aún, la evidencia reciente
Se sugiere que en pacientes con hipocalcemia, el
indica que, dependiendo de los agentes utilizados, pueden
uso de calcimiméticos sea reducido u omitido,
verse variaciones tan grandes como 30 % a 40 % en el valor
dependiendo de su severidad, de la medicación
corregido de calcio77. Por otra parte, las concentraciones de
concomitante y de la presencia de síntomas y sig-
calcio sérico están sujetas a variaciones importantes relacio-
nadas con la técnica utilizada en la toma de muestra. Así, por
Se sugiere que, si los niveles de PTHi disminu-
ejemplo, el uso de una vena periférica, el torniquete y la prác-
yen por debajo de 2 veces el límite superior nor-
tica de facilitar el llenado venoso mediante el cierre intermi-
mal del ensayo, el uso de calcitriol, análogos de
tente del puño pueden alterar hasta en un 10 % los valores de
vitamina D y/o calcimiméticos sea reducido u
calcio. A esto se añade el efecto del tipo de anticoagulante
utilizado para la preservación de la muestra77. En consecuen-cia, muchos autores sugieren abandonar la práctica de ajustar
4.19. En pacientes con ERC 3-5D e hiperparatiroidis-
los valores de calcio por la albúmina sérica, ya que, salvo en
mo severo que no responda al tratamiento médi-
condiciones especiales, puede llevar a una toma de decisio-
co/farmacológico, se sugiere considerar la para-
nes errónea y potencialmente peligrosa sobre la medicación
del paciente. Por tales motivos, consideramos razonable noutilizar las fórmulas disponibles de corrección del calcio sé-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 15
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
rico por albúmina, sino insistir en mejorar las condiciones de
no de la mineralización pudiendo llegar en casos extre-
determinación del calcio total y, siempre que sea posible, uti-
mos a la osteomalacia carencial, y a nivel sistémico por-
lizar las determinaciones del calcio ionizado.
que en general se asocia con desnutrición. En la serieDOPPS fue evidente un riesgo creciente de mortalidad enpacientes con ERC estadio 5D con niveles de fósforo me-
Tratamiento dirigido a controlar los niveles
nores de 2,0 mg/dl (0,65 mmol/l), aunque menos del 5 %
de fósforo y calcio
de los pacientes caen en esta categoría de riesgo.
A pesar de que la sobrecarga de fósforo es importante en es-
En síntesis, aun cuando no se han estudiado los beneficios de
tadios avanzados de la ERC, pocos pacientes con ERC 3-5
disminuir el nivel de fósforo sérico en los resultados clínicos
presentan concentraciones elevadas de fósforo en sangre en
a nivel del paciente (por ejemplo, hospitalización, fracturas
etapas tempranas de la enfermedad. La sobrecarga de fós-
óseas, eventos cardiovasculares, y mortalidad), numerosos
foro ha sido asociada al desarrollo y progresión del hiper-
datos epidemiológicos muestran asociación positiva, si bien
paratiroidismo secundario, niveles séricos reducidos de cal-
no una relación causal, entre niveles elevados de fósforo sé-
citriol, anomalías en el remodelado óseo y calcificación de
rico y mayor RR de mortalidad, independientemente del es-
tejidos blandos y arterias. También en pacientes con
tadio de la ERC. Existen datos experimentales que muestran
ERC 3-4, los niveles de fósforo sérico en el límite alto de
un efecto directo del fósforo en la secreción de PTH, en la
lo normal han sido asociados a un mayor riesgo de morta-
proliferación de células paratiroideas y en la calcificación
lidad78,79. Aunque no existen ensayos clínicos aleatorizados
vascular83-85. Si bien no existen estudios prospectivos aleato-
que demuestren el impacto de la disminución de la sobre-
rizados y controlados que muestren los beneficios en los re-
carga de fósforo en estos estadios, se sugiere mantener sus
sultados a cualquier nivel de control de fosfato, en pacientes
concentraciones séricas dentro de valores normales. Las
con ERC 3-5D se recomienda descender los niveles elevados
medidas sugeridas para dicho control incluyen restricción
de fósforo sérico al rango normal en un esfuerzo para contro-
de fósforo en la dieta (asegurando una ingesta proteica ade-
lar las complicaciones de TMO-ERC. El tratamiento siempre
cuada) y posiblemente el uso de quelantes de fósforo. La
debe ser individualizado.
elección del quelante debe ser individualizada y se sugieretomar en cuenta el perfil de efectos adversos de cada que-
El balance de calcio durante la HD es importante para de-
lante. En la tabla 7 se resume la información esencial de los
terminar la función cardiovascular a corto plazo, ya que este
principales quelantes de fósforo actualmente en uso.
influye en la tolerabilidad hemodinámica de la diálisis. Alargo plazo, el flujo de calcio durante la HD es un determi-
En múltiples estudios realizados en diferentes partes del
nante importante del balance de calcio total. La concentra-
mundo se ha mostrado una asociación entre la elevación
ción de calcio del dializado debería ajustarse para optimi-
del fósforo sérico y un incremento en el RR de muerte. En
zar la carga total de calcio corporal86. Teóricamente, esta
la mayoría de estos estudios, las asociaciones encontradas
estrategia debería ayudar a mejorar la salud ósea determi-
fueron consistentes y dependientes de la dosis, observán-
nando un balance negativo de calcio en pacientes con enfer-
dose aumentos progresivos en el riesgo al incrementar los
medad ósea adinámica y calcificación, e induciendo un flu-
niveles de fósforo sérico. El punto de inflexión, o rango
jo positivo de calcio durante la diálisis en pacientes con
en el que la concentración de fósforo se asocia de manera
hipocalcemia. Sin embargo, estas posibilidades no han sido
significativa con una elevada mortalidad por todas las
comprobadas de manera prospectiva. El porcentaje dializa-
causas, varía entre los diferentes estudios por las razones
ble del calcio corporal es muy pequeño y son limitados los
mencionadas anteriormente, 5,0-5,5 mg/dl (1,6-1,8 mmol/l),
estudios que evalúan el balance de calcio. La cantidad total
> 5,5 mg/dl (> 1,8 mmol/l) 6,0-7,0 mg/dl (1,9-2,3 mmol/l)
de calcio eliminada con cada tratamiento de diálisis depen-
y > 6,5 mg/dl (> 2,1 mmol/l)34,80-82. El estudio DOPPS mos-
derá no solamente de su concentración, sino también del ni-
tró que la relación entre la elevación del fósforo sérico y
vel sérico de calcio ionizado, del intervalo interdialítico y
el RR de mortalidad es consistente en todos los países
de la tasa de ultrafiltración87. Los estudios que han medido
analizados34. El estudio de Noordzij et al.80 también encon-
el flujo neto de calcio durante la hemodiálisis han mostrado
tró relaciones similares en pacientes de diálisis peritoneal
que este es casi nulo en pacientes que se dializan con una
(DP) y HD. Estos datos observacionales son consistentes
concentración de calcio de 1,25 mmol/l (2,5 mEq/l) en el
con datos provenientes de estudios experimentales y en
dializado88,89. En un estudio más reciente se usaron evalua-
animales, lo cual hace biológicamente factible esta aso-
ciones más frecuentes del dializado drenado y se encontró
ciación. Con base en estas observaciones, se recomienda
un flujo medio de calcio en cada sesión de diálisis de –187
realizar intervenciones que reduzcan el nivel de fósforo
± 232 mg (–46 ± 58 mmol) cuando se utilizó una concen-
hacia el rango normal.
tración de calcio de 1,25 mmol/l (2,5 mEq/l). Sin embargo,6 de los 52 pacientes estudiados tuvieron un balance positi-
La hipofosfatemia también puede ser causa de complica-
vo de calcio, apoyando el hecho de que el flujo de calcio en
ciones del metabolismo óseo porque ocasiona un trastor-
la hemodiálisis no es uniforme en todos los pacientes90. En
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 16
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Tabla 7. Comparación de quelantes de fósforo disponibles actualmente
Efectividad
y ventajas
Potencialmente tóxico:
quelante de fósforo
trastornos óseos
(enfermedad adinámica,
anemia microcítica,
demencia, efectos
gastrointestinales
100 mg a > 200 mg
Muy efectivo como
Potencialmente tóxico:
quelante de fósforo
trastornos óseos
Cápsulas (enfermedad
anemia microcítica,
demencia, efectos
gastrointestinales
Causa potencial de
elemental (169 mg de calcio
quelante de fósforo
hipercalcemia, riesgo de
elemental por tableta
Mayor capacidad quelante
calcificaciones extraóseas y
y menor absorción intestinal
supresión de PTH, efectos
que el carbonato de calcio
Mayor costo que el
carbonato de calcio
40 % de calcio elemental
Efectivo como quelante
Causa potencial de
(200 mg de calcio elemental
hipercalcemia, riesgo de
por tableta de 500 mg)
Disponible fácilmente
y supresión de PTH,
efectos adversos
gastrointestinales
Citrato de calcio
calcio elemental
absorción intestinal
Aproximadamente 28 %
Efectivo como quelante
de magnesio elemental
gastrointestinales,
(85 mg de magnesio) y 25 %
Potencialmente menor
potencialmente inductor
de calcio elemental
carga de calcio que
de hipermagnesemia
(100 mg de calcio)
las sales de calcio puras
Efectivo como quelante
No contiene calcio
niveles de bicarbonato
elemental. Puede
suplementos de calcio
Disminuye LDL en plasma
cuando hay hipocalcemia
Puede inducir acidosis
Efectos adversos
gastrointestinales
Similar al hidrocloruro
Puede requerir suplementos
Potencialmente mejora
el equilibrio ácido-base
hay hipocalcemia
comparado con hidrocloruro
Efectos adversos
gastrointestinales
o 500 mg de lantano
quelante de fósforo
Riesgo potencial de
elemental por tableta
acumulación de lantano
por su absorción intestinal
Efectos adversos
gastrointestinales
ERC: enfermedad renal crónica; LDL: lipoproteínas de baja densidad; PTH: hormona paratiroidea.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 17
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
consecuencia, se considera que, en general, el dializado con
mente con niveles más altos de calcio sérico (y más epi-
una concentración de calcio de 1,25 mmol/l (2,5 mEq/l) po-
sodios de hipercalcemia) y niveles séricos de PTH más
dría permitir un balance de calcio casi neutro para la mayo-
bajos que cuando se usa sevelamer-HCl o carbonato de
ría de los pacientes. No obstante, es importante destacar que
lantano. En resumen, no existen suficientes datos compa-
una baja concentración de calcio en el dializante podría tam-
rativos de eficacia en resultados clínicos que permitan re-
bién causar predisposición a arritmias cardíacas e inestabi-
comendar el uso de un quelante específico en todos los
lidad hemodinámica durante las sesiones de diálisis91,92. Se
pacientes. No obstante, existen datos consistentes con res-
sugiere mantener flexibilidad en las concentraciones del cal-
pecto al riesgo de inducir hipercalcemia y sobrecarga de
cio en el dializado, las cuales deberían ser individualizadas
calcio con el uso de quelantes que contienen calcio, por
en lo posible según las características del paciente.
lo que en este caso se necesitaría una reducción en la do-sis. Por otra parte, los datos disponibles en biopsias óseas
Consideraciones similares se aplican a la DP, en la que la
sugieren que aquellos pacientes que reciben quelantes que
concentración de calcio del dializado debe estar ajustada,
contienen calcio son más susceptibles de desarrollar en-
en la medida de lo posible, a las necesidades individuales
fermedad ósea adinámica.
de cada paciente. En comparación con los pacientes quereciben HD, aquellos que reciben DP están expuestos a
Hasta el momento, la evidencia sobre el posible papel de
una concentración de calcio en el dializado por períodos
los quelantes a base de calcio comparados con los que no
más largos. Por lo tanto, deben evitarse concentraciones
contienen calcio en la patogénesis de la calcificación vas-
de calcio en el líquido de diálisis peritoneal superiores a
cular no es concluyente, por lo que se requiere continuar
3,5 mEq/l (1,75 mmol/l) con el fin de prevenir una sobre-
la investigación para esclarecer este problema. El estudio
carga de calcio y la inducción de enfermedad ósea adi-
Dialysis Clinical Outcomes Revisited (DCOR)99 fue rea-
námica. Se recomiendan concentraciones de entre 2,5 y
lizado en 2.103 pacientes con ERC estadio 5D, aleatori-
3,0 mEq/l (1,25 y 1,50 mmol/l).
zados para recibir sevelamer-HCl o quelantes cálcicos(70 % con acetato de calcio y 30 % con carbonato de cal-
En una revisión sistemática de los estudios aleatorizados
cio), seguidos por 20 meses aproximadamente. Solo 1.068
controlados que examinan quelantes de fosfato93, se mos-
pacientes completaron el estudio y no se encontraron di-
tró que todas las medicaciones actualmente en uso como
ferencias en la mortalidad por todas las causas o por mor-
quelantes de fosfatos (sales de calcio, sales de aluminio,
talidad específica cuando se compararon los pacientes tra-
sevelamer y carbonato de lantano) son efectivas para re-
tados con hidrocloruro de sevelamer con los quelantes con
ducir las concentraciones de fósforo sérico.
calcio. Tampoco se observaron diferencias en la mortali-dad cardiovascular y hospitalización, aunque el sevelamer
En 3 ensayos clínicos aleatorizados, uno de ellos en pa-
se asoció con mejor sobrevida en pacientes mayores de 65
cientes con ERC 3-5 y dos en pacientes con ERC estadio
años de edad99. El estudio ha sido cuestionado, sin embar-
5D94-96, se encontró que el sevelamer puede atenuar la pro-
go, por su alta tasa de discontinuación del tratamiento: el
gresión de la calcificación arterial en comparación con los
porcentaje total de pacientes retirados del estudio fue de
quelantes a base de calcio. Sin embargo, dicho efecto no
47 % en la rama de sevelamer-HCl y 51 % en la de que-
fue observado en ensayos clínicos más recientes que com-
lantes cálcicos. Un segundo análisis del estudio DCOR100,
pararon el sevelamer con acetato de calcio97,98. Es de ha-
usando datos de los reclamos a Medicare, no mostró un
cer notar que las diferencias en el diseño de los estudios
efecto sobre la mortalidad total, mortalidad por causas es-
pudieran resultar en algunas de las disparidades observa-
pecíficas, morbilidad, primera hospitalización u hospita-
das entre ellos. Aun así, y dado el elevado riesgo cardio-
lización por causa específica. Sin embargo, este estudio
vascular de estos pacientes, se sugiere limitar la dosis de
mostró un efecto benéfico del sevelamer-HCl sobre los re-
quelantes que contienen calcio en los sujetos con eviden-
sultados secundarios de múltiples hospitalizaciones por
cia de calcificación vascular, así como en aquellos que
cualquier causa y días en el hospital100. No obstante, la in-
presentan PTH persistentemente disminuida o enferme-
formación de ambos análisis no ha sido considerada de
dad ósea adinámica, ya que esto parece favorecer la pro-
suficiente calidad como para catalogarla como concluyen-
gresión de la calcificación vascular.
El uso de carbonato de lantano y sevelamer-HCl97,98 no
Un segundo estudio96 aleatorizó 148 pacientes incidentes
afectó adversamente la histología ósea en estudios a corto
(pacientes nuevos) en hemodiálisis para recibir sevela-
plazo y, cuando se comparan con quelantes a base de cal-
mer-HCl o quelantes cálcicos, seguidos por un período
cio, podría ser menos probable que conduzcan a enferme-
medio de 44 meses. Solo 127 de estos pacientes tuvieron
dad ósea adinámica. Estudios comparativos con diferen-
una EBCT y los pacientes retirados del estudio alcanza-
tes quelantes de fosfato han mostrado diferencias en los
ron el 26 % en el grupo tratado con sevelamer-HCl y el
efectos sobre los parámetros bioquímicos de TMO-ERC.
27 % en el grupo con quelantes cálcicos. En el análisis
Por ejemplo, el uso de sales de calcio se asocia general-
univariado se encontró una tasa de mortalidad no ajusta-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 18
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
da marginalmente mayor en los pacientes asignados a que-
lismo mineral asociadas con la disminución en el filtrado
lantes que contenían calcio, comparada con los pacientes
glomerular. Dicha respuesta permite mantener temporal-
tratados con sevelamer-HCl. No obstante, en el análisis
mente un estado de homeostasis. Sin embargo, cuando la
multivariado, la diferencia entre los grupos fue significati-
respuesta de las paratiroides es excesiva o inapropiada,
va, lo que sugiere un desbalance de covariables que forma-
tiene consecuencias clínicas adversas. Actualmente, no
ron parte del modelo, incrementando la posibilidad de una
está claro cómo diferenciar de manera precisa una eleva-
aleatorización no exitosa. Como consecuencia, la calidad
ción compensadora en los niveles de PTH de una respues-
metodológica de este estudio se ha considerado como mo-
ta excesiva, y no existen ensayos clínicos que evalúen las
derada. Los estudios anteriores no arrojan datos de eventos
ventajas y riesgos de suprimir una elevación moderada de
cardiovasculares, aparte de las tasas de decesos, fracturas
los niveles de esta hormona en los pacientes con ERC mo-
o paratiroidectomía, haciendo imposible obtener conclusio-
derada o grave que aún no inician diálisis. Por lo tanto, no
nes a este respecto. Por otra parte, no hay estudios que ha-
existen datos que permitan establecer un nivel óptimo de
yan examinado los efectos del carbonato de lantano o cual-
PTH en estos pacientes.
quier otro quelante de fosfato (incluyendo compuestos quecontienen calcio o aluminio) en los resultados a nivel del
Aunque la evidencia es escasa, con base en la fisiopa-
paciente. Dados los hallazgos de los estudios analizados,
tología es razonable sugerir la búsqueda y corrección de
consideramos que se justifica limitar el consumo de calcio,
los factores modificables que puedan contribuir al hi-
bajo la forma de quelantes de fosfato, hasta tanto no se dis-
perparatiroidismo secundario (hipocalcemia, hiperfos-
ponga de mayor información en pacientes con ERC.
fatemia y deficiencia de vitamina D) en aquellos pa-cientes con niveles de PTH por encima del límitesuperior de lo normal para el ensayo empleado. Algu-
Tratamiento de los niveles anormales de PTHi
nos estudios en pacientes con ERC 3-5 sugieren que lasuplementación de colecalciferol y calcio puede reducir
Opciones terapéuticas
las concentraciones de PTH103.
Las formas terapéuticas de esteroles de la vitamina D dis-ponibles para su uso en pacientes con ERC en nuestra re-
En los pacientes con ERC 3-5D e hiperparatiroidismo
gión incluyen: ergocalciferol, colecalciferol y calcitriol.
secundario, el calcitriol y los análogos de la vitamina D
También se cuenta con análogos de vitamina D activa, de-
han demostrado ser útiles para disminuir los niveles de
rivados sintéticos de vitamina D (paricalcitol y doxercal-
PTH y mejorar la histología ósea en comparación con
ciferol) y de vitamina D (alfacalcidol). El doxercalcife-
placebo105-108. Por lo tanto, se sugiere su empleo en aque-
rol y alfacalcidol requieren de la 25-hidroxilación a nivel
llos sujetos que persisten con niveles por encima del lí-
hepático para convertirse en análogos activos.
mite superior del método utilizado, a pesar de la correc-ción de los factores modificables mencionados
La vitamina D y sus análogos han sido empleados en sujetos
con ERC 3-5D con el propósito de mejorar las anomalías en lahomeostasis mineral y reducir el desarrollo o progresión del hi-
Tanto el calcitriol como los análogos de la vitamina D
perparatiroidismo secundario. El uso de ergocalciferol y cole-
pueden incrementar el calcio y el fósforo séricos en pa-
calciferol ha recibido poca atención hasta el momento, pues se
cientes con ERC109, por lo que es pertinente suspender su
consideraba que los niveles de 25(OH)D no tenían gran rele-
uso en caso de hipercalcemia o hiperfosfatemia que no
vancia en los pacientes con ERC, dada su limitada conversión
responda a quelantes de fósforo.
a calcitriol por la 1-α-hidroxilasa renal. Sin embargo, la preva-lencia de niveles deficientes (< 15 ng/ml) o insuficientes
En estudios experimentales que comparan el uso de cal-
(15-30 ng/ml) de 25(OH)D se eleva en pacientes en todos los
citriol y diferentes análogos sintéticos de la vitamina D,
estadios de ERC101-103. Alternativamente, algunos estudios re-
se han encontrado diferencias en el grado de supresión
cientes sugieren una hidroxilación local importante de vitami-
de la PTH, histología ósea e incidencia de hipercalce-
na D en diferentes tejidos (por la presencia de 1-α-hidroxila-
mia, hiperfosfatemia y calcificación vasculares110-113. Sin
sa), independientemente de la renal. Los calcimiméticos
embargo, no existe evidencia a favor de ninguno de es-
(cinacalcet es el único disponible actualmente en algunos de
tos estudios114.
nuestros países) son moduladores alostéricos del receptor decalcio en las paratiroides, que ocasionan una disminución en
Vitamina D, análogos de vitamina D y calcimiméticos
la síntesis y liberación de PTH104. Sin embargo, su uso no está
Vitamina D: Las formas terapéuticas de esteroles de la
suficientemente documentado en etapas prediálisis.
vitamina D disponibles para su uso en pacientes con ERCen nuestra región incluyen: ergocalciferol, colecalciferol
Recomendaciones de tratamiento
y calcitriol. También se cuenta con análogos de vitamina
El hiperparatiroidismo que acompaña a la ERC represen-
D activa, derivados sintéticos de vitamina D (paricalcitol
ta una respuesta adaptativa a las alteraciones del metabo-
y doxercalciferol) y de vitamina D (alfacalcidol). El do-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 19
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
xercalciferol y alfacalcidol requieren de la 25-hidroxila-
dea al calcio extracelular119. La administración de calcimi-
ción a nivel hepático para convertirse en análogos activos,
méticos disminuye la síntesis y secreción de la PTH, redu-
mientras que el paricalcitol es considerado un activador
ce la proliferación de las células de la glándula paratiroi-
selectivo del receptor de vitamina D (ASRVD) y no re-
dea, modula la regulación de genes involucrados en
quiere un metabolismo previo para su acción.
sobreexpresión de los receptores de calcio y del RVD39. Sinembargo, se requieren estudios adicionales sobre el impac-
La vitamina D y sus análogos han sido empleados en su-
to del uso de los calcimiméticos en la morbimortalidad en
jetos con ERC 3-5D con el propósito de mejorar las ano-
pacientes con ERC. El cinacalcet es el único calcimiméti-
malías en la homeostasis mineral y reducir el desarrollo o
co disponible para uso clínico, no aumenta la absorción de
progresión del hiperparatiroidismo secundario. Como se
calcio y fósforo en el intestino. Esta característica lo dife-
mencionó previamente, la prevalencia de niveles deficien-
rencia de los esteroles de vitamina D, puesto que puede dis-
tes o insuficientes de 25(OH)D es alta en pacientes en to-
minuir los niveles de PTH sin incrementar las concentra-
dos los estadios de ERC101,115,116
ciones de calcio y fósforo. En consecuencia, el compuestopuede ser utilizado en pacientes con hiperparatiroidismo
Una serie de estudios demuestra que en pacientes con ERC
secundario cursando con hipercalcemia40.
5D los niveles elevados de PTHi pueden ser suprimidos efec-tivamente por el calcitriol, comparado con placebo50. Sin em-
Los estudios controlados sobre calcimiméticos son relativa-
bargo, es relativamente frecuente el desarrollo de hipercalce-
mente escasos y la mayoría de los trabajos publicados se re-
mia en los pacientes tratados con calcitriol. Este problema
fieren pacientes en diálisis. En un estudio aleatorizado, doble
puede ser limitado con el uso de análogos de la vitamina D.
ciego, controlado con placebo, se evaluó el efecto del trata-
El soporte para el uso de análogos de la vitamina D (parical-
miento con cinacalcet en pacientes con ERC que no estaban
citol y doxercalciferol) se basa en estudios experimentales
recibiendo diálisis120. No obstante, requieren más estudios en
que muestran una supresión dosis-equivalente de la PTH si-
poblaciones que no estén en diálisis antes de poder sugerir su
milar o superior al calcitriol, pero con menos respuesta cal-
uso en la ERC estadios 3-5. Existe un solo estudio controla-
cémica y/o actividad fosfatémica37,117. El paricalcitol es un
do y aleatorizado que compara los resultados histomorfomé-
análogo sintético de la vitamina D con modificaciones en la
tricos de un año de tratamiento con cinacalcet con el trata-
cadena lateral (D2) y el anillo A (19-nor) que le confieren ma-
miento estándar en pacientes con ERC estadio 5D, usando
yor selectividad al interactuar con el ASRVD. El paricalcitol
biopsias de hueso repetidas a tiempo cero y a 12 meses121. En
suprime la síntesis y la secreción de PTH, pero se ha demos-
las biopsias del grupo placebo, el 45 % mostró un mejor re-
trado que tiene una menor respuesta calcémica y fosfatémica
cambio y el 23 % mostró un mayor recambio (empeoró). Nin-
que el calcitriol, por lo que ha sido utilizado con frecuencia
guno de los pacientes mostró osteomalacia, y el cambio en la
creciente para el control del hiperparatiroidismo secundario
media del tiempo de mineralización (MLT) fue el mismo en el
de la ERC37. El doxercalciferol es un análogo sintético de la
grupo placebo que en el de cinacalcet. Algunas de las biopsias
vitamina D que requiere un proceso metabólico de activación
mostraron un MLT anormalmente alto, pero no se suministra-
por la CYP27 en el hígado para formar la 1-α-25(OH) D ,
ron detalles. El volumen óseo aumentó ligeramente pero no de
metabolito mayor, y la 1-α-24(OH) D , metabolito menor. La
manera significativa en el grupo con cinacalcet y no hubo cam-
activación del doxercalciferol no requiere activación por el
bio en el grupo placebo. En resumen, en este estudio no hubo
riñón. La 1-α-25(OH) D tiene la capacidad de suprimir la
diferencias significativas con respecto a la histomorfometría
síntesis y secreción de PTH mediante la activación del recep-
ósea, pero estuvo limitado por un pequeño número de pacien-
tor de vitamina D (RVD), con una menor respuesta calcémi-
tes. Los efectos adversos secundarios reportados más frecuen-
ca y fosfatémica que el calcitriol, el compuesto natural. Por
temente con el uso de cinacalcet han sido náuseas y vómitos122-
estos motivos se usa para el control de hiperparatiroidismo
124. En los pacientes tratados con cinacalcet, las náuseas se
secundario38. Hasta el momento no existe consenso amplio
presentaron consistentemente, con una frecuencia de más de
sobre las dosis iniciales de paricalcitol y doxercalciferol. En
una vez y media que lo habitual, y los vómitos, el doble. En el
el caso del paricalcitol, se han utilizado diferentes esquemas
estudio de Lindberg123, aproximadamente un cuarto de los pa-
de dosificación que incluyen un cálculo según el peso seco
cientes presentaron algunos eventos adversos graves, tanto en
del paciente y fórmulas basadas en el valor inicial de la PTHi.
el grupo con tratamiento como en el grupo placebo, los cuales
Así, por ejemplo, en algunos estudios se han utilizado las fór-
podrían o no estar relacionados con el tratamiento. Tanto en el
mulas basadas en el cociente del valor inicial de PTHi divi-
estudio de Block122 (15 %) como en el de Lindberg123 (9 %),
dido entre 80 y hasta 120 a fin de limitar los posibles efectos
aproximadamente el doble de pacientes suspendieron el trata-
secundarios en el desarrollo de hipercalcemia o hiperfosfate-
miento en el grupo con cinacalcet debido a los efectos secun-
mia, o una supresión exagerada de los niveles de PTHi118.
darios, principalmente vómitos, náuseas y otros eventos gas-trointestinales. En ambos estudios también, el 5 % de los
Calcimiméticos: Los calcimiméticos actúan como modu-
pacientes tratados con cinacalcet y menos del 1 % de los pa-
ladores alostéricos del receptor de calcio, incrementado la
cientes en los grupos control tuvieron valores de calcio sérico
sensibilidad del receptor de calcio en la célula paratiroi-
por debajo de 7,5 mg/dl (1,9 mmol/l). Los episodios hipocal-
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 20
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
cémicos fueron transitorios y raramente asociados con sínto-
cientes que tuvieron paratiroidectomía eran más jóvenes
mas. En otro estudio de efectividad y seguridad, de 26 a 52 se-
y tenían menos comorbilidades.
manas de duración125, se consideró que el tratamiento con ci-nacalcet era seguro y efectivo. Los efectos adversos
Debido a la falta de estudios controlados y al azar que permi-
secundarios (principalmente náuseas y vómitos) provocaron la
tan una adecuada comparación entre la terapia médica
vs la
interrupción de la terapia en un 10 % de los pacientes tratados
quirúrgica del hiperparatiroidismo secundario, estas estrate-
con cinacalcet y en ninguno del grupo de control, mientras que
gias de manejo son difíciles de comparar. En pacientes no ap-
al 3 % de estos últimos se les tuvo que realizar paratiroidecto-
tos para cirugía o que estén en espera de cirugía puede pen-
mía, lo que no sucedió con ninguno de los tratados con cina-
sarse en las terapias médicas, incluyendo tratamiento con
calcet. A los 12 meses, no se observó diferencia alguna entre
cinacalcet. En pacientes aptos para cirugía, generalmente se
grupos cuando se usó vitamina D (cinacalcet 64 %
vs placebo
plantea una paratiroidectomía cuando el hiperparatiroidismo
63 %) o quelantes de fosfato (92 %
vs 96 %, respectivamente)
es grave y refractario al control por fármacos, usualmente
y tampoco hubo diferencia en el calcio elemental ingerido con
después de un ensayo terapéutico con calcitriol, un análogo
las comidas.
de la vitamina D o cinacalcet.
En pacientes con ERC estadios 3-5D con hiperparatiroi-
La paratiroidectomía también puede plantearse cuando el
dismo severo que no respondan a terapia médica/farma-
control médico para reducir los niveles de PTHi trae como
cológica, sugerimos la paratiroidectomía (
2B).
resultado aumento inaceptable de los niveles séricos decalcio y/o de fósforo (como ocurre con frecuencia cuando
No existen estudios que evalúen resultados de mortalidad,
se usa calcitriol o análogos de la vitamina D) o cuando no
enfermedad cardiovascular, hospitalización, fracturas,
hay tolerancia debido a los efectos adversos. Puede ser di-
evolución de la enfermedad ósea, parámetros bioquímicos
fícil determinar lo que constituye un «hiperparatiroidismo
o calidad de vida posparatiroidectomía. Sin embargo,
refractario». Está claro que, mientras más elevada sea la
cuando la paratiroidectomía es ejecutada por un cirujano
PTH, es menos probable que la glándula involucione en
con experiencia, resulta en una reducción marcada y sos-
respuesta a la terapia médica124. En suma, ante un hiperpa-
tenida de los niveles séricos de PTHi, calcio y fósforo.
ratiroidismo secundario en pacientes con ERC 3-5D, el
Una paratiroidectomía subtotal o total con autotrasplante
manejo debe comenzar con tratamiento médico (control
reduce de manera efectiva los niveles elevados de PTHi,
del calcio, fósforo, vitamina D, análogos de vitamina D
calcio, fósforo y fosfatasa alcalina total. No existe eviden-
y/o calcimiméticos), y solo ante el fracaso del tratamiento
cia de que una paratiroidectomía total con reimplante in-
médico o por la presencia de calcifilaxis está indicada la
mediato del tejido paratiroideo ectópico tenga mejor re-
sultado que la paratiroidectomía subtotal 7/8, por lo quese sugiere esta última. No aconsejamos la paratiroidecto-mía total sin la implantación inmediata del tejido parati-roideo por el riesgo de desarrollar hipoparatiroidismo de
Conflictos de interés
muy difícil manejo. La mayor parte de los pacientes quefueron sometidos a una paratiroidectomía muestra mejo-
En la elaboración del presente trabajo, la Sociedad Latinoa-
ría en los parámetros bioquímicos, pero es difícil evaluar
mericana de Nefrología e Hipertensión (SLANH) ha tomado
las comparaciones entre las terapias médicas y quirúrgi-
especial cuidado en evitar cualquier influencia o interferen-
cas con relación a resultados de morbilidad y mortalidad.
cia de la industria o de grupos privados a fin de impedir po-
En ausencia de estudios controlados, los estudios obser-
sibles situaciones que pudieran ser percibidas como conflic-
vacionales disponibles en los que se comparan pacientes
tos de interés institucional, personal o comercial que pudieran
tratados quirúrgica o médicamente están expuestos a una
producirse como consecuencia de las relaciones normales de
selección sesgada que limita la validez de los resultados
la SLANH como sociedad científica.
encontrados. Los individuos que son candidatos a una pa-ratiroidectomía difieren de los que se seleccionaron para
En lo individual, todos los miembros del Comité de Metabo-
estudios con cinacalcet. El estudio con la mayor muestra
lismo Mineral y Óseo de la SLANH que participaron en la
es el de Kestenbaum et al.126, el cual mostró una mortali-
elaboración de las presentes guías han hecho una declaración
dad inferior a largo plazo en pacientes que fueron trata-
de conflictos de interés donde se exponen las relaciones que
dos con paratiroidectomía comparados con una cohorte no
pudieran ser percibidas como conflictos de interés, tal como
tratada quirúrgicamente; sin embargo, se trató de un estu-
se describe a continuación.
dio retrospectivo observacional, en el que la mortalidadposoperatoria a corto plazo fue alta (3,1 %), y el mejor re-
Dr. Ezequiel Bellorin-Font: Conferencista/consultante: Sano-
sultado que se obtuvo a largo plazo después de la parati-
fi, Abbott. Conferencista: Amgen.
roidectomía podría ser debido a una selección sesgada,como en el estudio de Trombetti et al.127, en el que los pa-
Dr. Pablo Ambrosoni: No tiene conflictos de interés que declarar.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 21
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Dr. Raúl G. Carlini: Conferencista/consultante: Laboratorios
Hyperparathyroidism: Pathogenesis, Disease Progression, and
Abbott, Sanofi-Genzyne. Conferencista: Novartis, Laborato-
Therapeutic Options. Clin J Am Soc Nephrol 2011;6:913-21.
rio Merck Sharp & Dohme.
7. Canalejo R, Canalejo A, Martinez-Moreno JM, Rodriguez-Ortiz ME,
Estepa JC, Mendoza FJ, et al. FGF23 fails to inhibit uremic
Dr. Aluizio B. Carvalho: Asesor/consultante: Sanofi; Labora-
parathyroid glands. J Am Soc Nephrol 2010;21:1125-35.
torios Abbott, Amgen. Conferencista: Abbott, Amgem, Lilly.
8. Galitzer H, Ben-Dov IZ, Silver J, Naveh-Many T. Parathyroid cell
resistance to fibroblast growth factor 23 in secondary
Dr. Ricardo Correa-Rotter: Conferencista: Laboratorios
hyperparathyroidism of chronic kidney disease. Kidney Int
Abbott, Sanofi-Genzyme, Amgen, Novartis. Miembro del co-
mité ejecutivo del estudio de investigación Evolve, auspicia-
9. Pereira RC, Juppner H, Azucena-Serrano C, Yadin O, Salusky IB,
do por Amgen.
Wesseling-Perry K. Patterns of FGF-23, DMP1 and MEPE expression in
patients with chronic kidney disease. Bone 2009;45:1161-8.
Dr. Alfonso Cueto-Manzano: No tiene conflictos de interés
10. Andress DL. Vitamin D in chronic kidney disease: a systemic role for
que declarar.
selective vitamin D receptor activation. Kidney Int 2006;69:33-43.
11. Kazama JJ, Sato F, Omori K, Hama H, Schiltz E, Rodríguez-Iturbe B.
Dr. Aquiles Jara: Asesoría: Laboratorios Abbott, Diaverum.
Pretreatment serum FGF-23 levels predict the efficacy of calcitriol
therapy in dialysis patients. Kidney Int 2005;67:1120-5.
Dra. Vanda Jorgetti: Asesora/consultante: Sanofi-Abbott;
12. Slatopolsky E. The intact nephron hypothesis: the concept and its
Amgem. Conferencista: Sanofi-Genzyme, Laboratorios
implications for phosphate management in CKD-related mineral and
Abbott, Amgem.
bone disorder. Kidney Int Suppl 2011;(121):S3-8.
13. Kumar R, Thompson JR. The regulation of parathyroid hormone
Dr. Armando Negri: Conferencista: Laboratorios Abbott,
secretion and synthesis. J Am Soc Nephrol 2011;22:216-24.
14. Slatopolsky E, Brown A, Dusso A. Pathogenesis of secondary
hyperparathyroidism. Kidney Int Suppl 1999;73:S14-9.
Dra. Inés Olaizola: No tiene conflictos de interés que
15. Ott SM. Histomorphometric measurements of bone turnover,
mineralization, and volume. Clin J Am Soc Nephrol 2008;Suppl
Dr. Isidro Salusky: Financiamiento de investigación: Labora-
16. Moe SM, Drüeke T. Improving global outcomes in mineral and bone
torios Abbott, Sanofi-Genzyme, Amgen. Consultante: Kure-
disorders. Clin J Am Soc Nephrol 2008;Suppl 3:S127-30.
ha America Inc. y Cytochroma.
17. Rix M, Andreassen H, Eskildsen P, Langdahl B, Olgaard K. Bone
mineral density and biochemical markers of bone turnover in patients
Dr. Eduardo Slatopolsky: Conferencista/financiamiento de
with predialysis chronic renal failure. Kidney Int 1999;56:1084-93.
investigación: Laboratorios Abbott, Genzyme-Sanofi.
18. Sherrard DJ, Hercz G, Pei Y, Maloney NA, Greenwood C, Manuel A,
et al. The spectrum of bone disease in chronic renal failure: An
Dr. José R. Weisinger: Conferencista/asesor: Sanofi-Genzyme,
evolving disorder. Kidney Int 1993;43:436-42.
19. Hruska KA, Teitelbaum SL. Renal osteodystrophy. N Engl J Med
20. Gal-Moscovici A, Sprague SM. Role of bone biopsy in stages 3 to 4
chronic kidney disease. Clin J Am Soc Nephrol 2008;Suppl 3:S170-4.
1. KDIGO Clinical practice guideline for the diagnosis, evaluation,
21. Jevtic V. Imaging of renal osteodystrophy. Eur J Radiol 2003;46:85-95.
prevention, and treatment of Chronic Kidney Disease-Mineral and
22. Adams JE. Renal bone disease: radiological investigation. Kidney Int
Bone Disorder (CKD-MBD). Kidney Int Suppl 2009;113:S1-S130.
2. Imanishi Y, Inaba M, Nakatsuka K, Nagasue K, Okuno S, Yoshihara A,
23. Mazzaferro S, Pasqualia M, Pirrò G, Rotondi S, Tartaglione L. The
et al. FGF-23 in patients with end-stage renal disease on
bone and the Kidney. Arch Biochem Biophys 2010;503:95-102.
hemodialysis. Kidney Int 2004;65:1943-6.
24. Cournot-Witmer G, Zingraff J, Plachot JJ, Escaig F, Lefèvre R, Boumati
3. Yoshiko Y, Wang H, Minamizaki T, Ijuin C, Yamamoto R, Suemune S,
P, et al. Aluminum localization in bone from hemodialyzed patients:
et al. Mineralized tissue cells are a principal source of FGF23. Bone
relationship to matrix mineralization. Kidney Int 1981;20:375-8.
25. Lobão R, Carvalho AB, Cuppari L, Ventura R, Lazaretti-Castro M,
4. Perwad F, Zhang MY, Tenenhouse HS, Portale AA. Fibroblast growth
Jorgetti V, et al. High prevalence of low bone mineral density in
factor 23 impairs phosphorus and vitamin D metabolism in vivo and
pre-dialysis chronic kidney disease patients: bone
suppresses 25-hydroxyvitamin D-1alpha-hydroxylase expression in
histomorphometric analysis. Clin Nephrol 2004;62:432-9.
vitro. Am J Physiol Renal Physiol 2007;293:F1577-583.
26. Frazão JM, Martins P. Adynamic bone disease: clinical and
5. Ben-Dov IZ, Galitzer H, Lavi-Moshayoff V, Goetz R, Kuro-o M,
therapeutic implications. Curr Opin Nephrol Hypertens
Mohammadi M, et al. The parathyroid is a target organ for FGF23 in
rats. J Clin Invest 2007;117:4003-8.
27. Watanabe R, Lemos MM, Manfredi SR, Draibe SA, Canziani ME.
6. Cunningham J, Locatelli F, Rodriguez M. Secondary
Impact of cardiovascular calcification in nondialyzed patients after
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 22
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
24 months of follow-up. Clin J Am Soc Nephrol 2010;5:189-94.
studies and randomized controlled trials. Clin J Am Soc Nephrol
28. London GM, Pannier B. Arterial functions: how to interpret the
complex physiology. Nephrol Dial Transplant 2010;25:3815-23.
46. Mehrotra R, Kermah DA, Salusky IB, Wolf MS, Thadhani RI, Chiu YW,
29. Adragao T, Pires A, Lucas C, Birne R, Magalhaes L, Gonçalves M, et al. A
et al. Chronic kidney disease, hypovitaminosis D, and mortality in the
simple vascular calcification score predicts cardiovascular risk in
United States. Kidney Int 2009;76:977-83.
haemodialysis patients. Nephrol Dial Transplant 2004;19:1480-8.
47. London GM, Marty C, Marchais SJ, Guerin AP, Metivier F, de Vernejoul
30. Honkanen E, KauppilaL, Wikström B, Rensma PL, Krzesinski JM,
MC. Arterial calcifications and bone histomorphometry in end-stage
Aasarod K, et al. Abdominal aortic calcification in dialysis patients:
renal disease. J Am Soc Nephrol 2004;15:1943-51.
results of the CORD study. Nephrol Dial Transplant 2008;23:4009-15.
48. London GM, Marchais SJ, Guérin AP, Boutouyrie P, Métivier F, de Vernejoul
31. Rogers NM, Coates PT. Calcific uraemic arteriolopathy: an update. Curr
MC, et al. Association of bone activity, calcium load, aortic stiffness, and
Opin Nephrol Hypertens 2008;17:629-34.
calcifications in ESRD. J Am Soc Nephrol 2008;19:1827-35.
32. Tominaga Y. Uremic calciphylaxis syndrome: Calcified uremic
49. Piraino B, Chen T, Cooperstein L, Segre G, Puschett J. Fractures and
artheriolopathy. Intern Med 2001;40:1174-5.
vertebral bone mineral density in patients with renal osteodystrophy. Clin
33. Melamed ML, Eustace JA, Plantiga LC, Jaar BG, Fink NE, Parekh RS, et
al. Third generation parathyroid hormone assay and all cause mortality
50. Barreto FC, Barreto DV, Moisés RMA, Neves CL, Jorgetti V, Draibe
in incident patients: The CHOICE study. Nephrol Dial Transplant
SA, et al. Osteoporosis in hemodialysis patients revisited by bone
histomorphometry: A new insight into an old problem. Kidney Int
34. Tentori F, Blayney MJ, Albert JM, Gillespie BW, Kerr PG, Bommer J, et al.
Mortality risk for dialysis patients with levels of serum calcium,
51. Jamal SA, Chase C, Goh YI, Richardson R, Hawker GA. Bone density and
phosphorus, and PTH. The Dialysis Outcome and Practice Patterns Study
heel ultrasound testing do not identify patients with dialysis dependent
(DOPPS). Am J Kidney Dis 2008;52:519-30.
renal failure and have had fractures. Am J Kidney Dis 2002;39:843-9.
35. Regidor DL, Kovesdy CP, Mehrotra R, Rambod M, Jing J, McAllister CJ, et
52. Jamal SA, Hayden JA, Beyene J. Low bone mineral density and fractures
al. Serum alkaline phosphatase predicts mortality among maintenance
in long-term hemodialysis patients: a meta-analysis. Am J Kidney Dis
hemodialysis patients. J Am Soc Nephrol 2008;19:2193-203.
36. Blayney MJ, Pisoni RL, Bragg-Gresham JL, Bommer J, Piera L, Saito A, et
53. Reichel H, Esser A, Roth H-J, Schmidt-Gayk H. Influence of PTH assay
al. High alkaline phosphatase levels in hemodialysis patients are
methodology on differential diagnosis of renal bone disease. Nephrol Dial
associated with higher risk of hospitalization and death. Kidney Int
54. Monier-Faugere MC, Geng Z, Mawad H, Friedler RM, Gao P, Cantor TL,
37. Parfitt AM. Bone and plasma calcium homeostasis. Bone 1987;8 (Suppl
et al. Improved assessment of bone turnover by the PTH-(1-84)/large C-
PTH fragments ratio in ESRD patients. Kidney Int 2001;60:1460-8.
38. Gauci C, Moranne O, Fouqueray B, de la Faille R, Maruani G, Haymann
55. Coen G, Ballanti P, Bonucci E, Calabria S, Costantini S, Ferrannini M, et al.
JP, et al. Pitfall of measuring total blood calcium in patients with CKD. J
Renal osteodystrophy in predialysis and hemodialysis patients:
Am Soc Nephrol 2008;19:1592-8.
comparison of histologic patterns and diagnostic predictivity of intact
39. Portale AA, Halloran BP, Morris Jr RC. Dietary intake of phosphorus
PTH. Nephron 2002;91:103-11.
modulates the circadian rhythm in serum concentration of phosphorus.
56. Gerakis A, Hutchison AJ, Apostolou T, Freemont AJ, Billis A. Biochemical
Implications for the renal production of 1,25-dihydroxyvitamin D. J Clin
markers for noninvasive diagnosis of hyperparathyroid bone disease and
adynamic bone in patients on haemodialysis. Nephrol Dial Transplant
40. De Boer IH, Rue TC, Kestenbaum B. Serum phosphorus
concentrations in the Third National Health and Nutrition
57. Fletcher S, Jones RG, Rayner HC, Harnden P, Hordon LD, Aaron JE, et al.
Examination Survey (NHANES III). Am J Kidney Dis 2009;53:399-407.
Assessment of renal osteodystrophy in dialysis patients: use of bone
41. Triverdi H, Moore H, Aralla J. Lack of significant circadian and post-
alkaline phosphatase, bone mineral density and parathyroid ultrasound
prandial variation in phosphate levels in subjects receiving chronic
in comparison with bone histology. Nephron 1997;75:412-9.
hemodialysis therapy. J Nephrol 2005;18:417-22.
58. Lehmann G, Ott U, Kaemmerer D, Schuetze J, Wolf G. Bone
42. Souberbielle JC, Boutten A, Carlier MC, Chevenne D, Coumaros G,
histomorphometry and biochemical markers of bone turnover in
Lawson-Body E, et al. Inter-method variability in PTH measurement:
patients with chronic kidney disease stages 3–5. Clin Nephrol
implication for the care of CKD patients. Kidney Int 2006;70:345-50.
43. Ravani P, Malberti F, Tripepi G, Pecchini P, Cutrupi S, Pizzini P, et al.
59. Vliegenthart R, Oudkerk M, Song B, van der Kuip DA, Hofman A,
Vitamin D levels and patient outcome in chronic kidney disease.
Witteman JC. Coronary calcification detected by electron-beam
Kidney Int 2009;75:88-95.
computed tomography and myocardial infarction. The Rotterdam
44. Drechsler C, Verduijn M, Pilz S, Dekker FW, Krediet RT, Ritz E, et al.,
Coronary Calcification Study. Eur Heart J 2002;23:1596-603.
for the NECOSAD Study Group. Vitamin D status and clinical
60. Vliegenthart R, Hollander M, Breteler MM, van der Kuip DA, Hofman A,
outcomes in incident dialysis patients: results from the NECOSAD
Oudkerk M, et al. Stroke is associated with coronary calcification as
study. Nephrol Dial Transplant 2011;26:1024-32.
detected by electron-beam CT: the Rotterdam Coronary Calcification
45. Kandula P, Dobre M, Schold JD, Schreiber MJ, Mehrotra R,
Study. Stroke 2002;33:462-5.
Navaneethan SD. Vitamin D supplementation in chronic kidney
61. Ix JH, Shlipak MG, Katz R, Budoff MJ, Shavelle DM, Probstfield JL, et al.
disease: A systematic review and meta-analysis of observational
Kidney function and aortic valve and mitral annular calcification in the
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 23
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
Multi-Ethnic Study of Atherosclerosis (MESA). Am J Kidney Dis
serum calcium in dialysis patients. Semin Dial 2010;23:283-9.
78. Kestenbaum B. Phosphate metabolism in the setting of chronic kidney
62. Rodríguez-García M, Gómez-Alonso C, Naves-Díaz, Diaz-Lopez JB, Diaz-
disease: significance and recommendations for treatment. Semin Dial
Corte C, Cannata-Andía JB; Asturias Study Group. Vascular calcifications,
vertebral fractures and mortality in haemodialysis patients. Nephrol Dial
79. Bellasi A, Mandreoli M, Baldrati L, Corradini M, Di Nicolò P, Malmusi G, et
al. Chronic kidney disease progression and outcome according to serum
63. Bellasi A, Ferramosca E, Muntner P, Ratti C, Wildman RP, Block GA, et al.
phosphorus in mild-to-moderate kidney dysfunction. Clin J Am Soc
Correlation of simple imaging tests and coronary artery calcium measured
by computed tomography in hemodialysis patients. Kidney Int
80. Noordzij M, Korevaar JC, Boeschoten EW, Dekker FW, Bos WJ, Krediet
RT; Netherlands Cooperative Study on the Adequacy of Dialysis
64. Haydar AA, Covic A, Colhoun H, Rubens M, Goldsmith DJ. Coronary
(NECOSAD) Study Group. The Kidney Diseases Outcomes Quality
artery calcification and aortic pulse wave velocity in chronic kidney disease
Initiative (K/DOQI) Guideline for Bone Metabolism and Disease in CKD:
patients. Kidney Int 2004;65:1790-4.
associated with mortality in dialysis patients. Am J Kidney Dis
65. Sigrist M, Bungay P, Taal MW, McIntyre CW. Vascular calcification and
cardiovascular function in chronic kidney disease. Nephrol Dial Transplant
81. Kalantar-Zadeh K, Kuwae N, Regidor DL, Kovesdy CP, Kilpatrick RD,
Shinaberger CS, et al. Survival predictability of tine-varying indicators of
66. Nissen SE, Tuzcu EM, Schoenhagen P, Brown BG, Ganz P, Vogel RA, et al.
bone disease in maintenance hemodialysis patients. Kidney Int
Effect of intensive compared with moderate lipid-lowering therapy on
progression of coronary atherosclerosis:A randomized controlled trial.
82. Young EW, Albert JM, Satayathum S, Gillespie BW, Kerr PG, Bommer J,
et al. Predictors and consequences of altered mineral metabolism: the
67. Sever PS, Dahlof B, Poulter NR, Wedel H, Veevers G, Caufield M, et al.
Dialysis Outcomes and Practice Patterns Study (DOPPS). Am J Kidney Dis
Prevention of coronary and stroke events with atorvastatin in
hypertensive patients who have average or lower-than-average
83. Estepa JC, Aguilera-Tejero E, Lopez I, Almaden Y, Rodriguez M, Felsenfeld
cholesterol concentrations, in the Anglo-Scandinavian Cardiac
AJ. Effect of phosphate on parathyroid hormone secretion in vivo. J Bone
Outcomes Trial-Lipid Lowering Arm (ASCOT-LLA): a multicentere
Miner Res 1999;14:1848-54.
randomised controlled trial. Lancet 2003;361:1149-58.
84. Roussanne MC, Lierherr M, Souberbielle JC, Sarfati E, Drüeke T,
68. La Rosa JC, Grungy SM, Waters DD, Shear C, Barter P, Fruchart JC, et al.;
Bourdeau A. Human parathyroid cell proliferation in response to calcium,
Treating to New Targets (TNT) Investigators. Intensive lipid lowering with
MPS R-467, calcitriol and phosphate. Eur J Clin Invest 2001;31:610-6.
atorvastatin in patients with stable coronary disease. N Engl J Med
85. Jono S, McKee MD, Murry CE, Shioi A, Nishizawa Y, Mori K, et al.
Phosphate regulation of vascular smooth muscle cell calcification. Circ
69. Wanner C, Krane V, März W, Olschewski M, Mann JF, Ruf G, et al., for the
Res 2000;87:E10-7.
German Diabetes and Dialysis Study Investigators Atorvastatin in patients
86. Toussaint N, Cooney P, Kerr PG. Review of dialysis calcium concentration
with type 2 diabetes mellitus undergoing hemodialysis. N Engl J Med
in hemodialysis. Hemodial Int 2006;10:326-37.
87. Mc Intyre CW. Calcium balance during hemodialysis. Semin Dial
70. Fellström B, Hallvard H, Alan G, Rose H, Schmieder R, Wilpshaar W, et al.,
on behalf of the AURORA Study Group Effect of Rosuvastatin on
88. Hou SH, Zhao J, Ellman CF, Hu J, Griffin Z, Spiegel DM, et al. Calcium and
Outcomes in Chronic Haemodialysis Patients: Baseline Data from the
phosphorous fluxes during hemodialysis with low calcium dialysate. Am J
AURORA Study. Kidney Blood Press Res 2007;30:314-22.
Kidney Dis 1991;18:217-24.
71. Baigent C, Landra MJ, Reith C, Emberson J, Wheeler DC, Tomson C, et al.;
89. Argilés A, Kerr PG, Canaud B, Flavier JL, Mion C. Calcium kinetics and
SHARP Investigators. The effects of lowering LDL cholesterol with
long-term effects of lowering dialysate calcium concentration. Kidney Int
simvastatine plus ezetimiba in patients with chronic kidney disease (Study
of Heart and Renal Protection): A randomized placebo-controlled trial.
90. Sigrist M, McIntyre CW. Calcium exposure and removal in chronic
hemodialysis patients. J Ren Nutr 2006;16:41-6.
91. Maynard JC, Cruz C, Kleerekoper, Levin NW. Blood pressure response to
73. Levitt H, Smith KG, Rosner MH. Variability in calcium phosphorus and
changes in serum ionized calcium during hemodialysis. Ann Intern Med
parathyroid hormone in patients on hemodialysis. Hemodial Int
92. Van der Sande FM, Cheriex EC, van Kuijk WH, Leunissen KM, et al. Effect
74. O'Neill WC. The fallacy of the calcium-phosphorus product. Kidney Int
of dialysate calcium concentrations on intradialytic blood pressure course
in cardiac-compromised patients. Am J Kidney Dis 1998;32:125-31.
75. Ketteler M, Brandenburg V, Jahnen-Dechent W, Westenfeld R, Floege J.
93. National Kidney Foundation. K/DOQI clinical guidelines for bone
Do not be misguided by guidelines:the calcium x phosphate product can
metabolism and disease in chronic kidney disease. Am J Kidney Dis
be a Trojan horse. Nephrol Dial Transplant 2005;20:673-7.
76. James MT, Zhang J, Lyon AW, Hemmelgarn BR. Derivation and
94. Russo D, Miranda I, Ruocco C, Battaglia Y, Buonanno E, Manzi S, et al.
internal validation of an equation for albumin-adjusted calcium.
The progression of coronary artery calcification in predialysis patients on
BMC Clin Pathol 2008;8:1-6.
calcium carbonate or sevelamer. Kidney Int 2007;72:1255-61.
77. Morton AR, Garland JS, Holden RM. Is the calcium correct? Measuring
95. Chertow GM, Burke SK, Raggi P. Sevelamer attenuates the progression
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 24
Comité de Metabolismo Mineral y Óseo, SLANH. Guías de práctica clínica TMO-ERC
of coronary and aortic calcification in hemodialysis patients. Kidney Int
Differential effects of very high doses of doxercalciferol and paricalcitol
on serum phosphorus in hemodialysis patients. Clin Nephrol
96. Block GA, Spiegel DM, Ehrlich J, Mehta R, Lindbergh J, Dreisbach A, et
al. Effects of sevelamer and calcium on coronary artery calcification in
112. Mizobuchi M, Finch JL, Martin DR, Slatopolsky E. Differential effects of
patients new to hemodialysis. Kidney Int 2005;68:1815-24.
vitamin D receptor activators on vascular calcification in uremic rats.
97. Barreto DV, Barreto Fde C, de Carvalho AB, Cuppari L, Draibe SA,
Kidney Int 2007;72:709-15.
Dalboni MA, et al. Phosphate binder impact in bone remodeling and
113. Cardús A, Panizo S, Parisi E, Fernandez E, Valdivielso JM. Differential
coronary calcification. Results from the BRIC study. Nephron Clin Pract
effects of vitamin D analogs on vascular calcification. J Bone Miner Res
98. Qunibi W, Moustafa M, Muenz LR, He DY, Kessler PD, Diaz-Buxo JA, et
114. Sprague SM, Coyne D. Control of secondary hyperparathyroidism by
al.; CARE-2 Investigators. A 1-year randomized trial of calcium acetate
vitamin D receptor agonists in chronic kidney disease. Clin J Am Soc
versus sevelamer on progression of coronary artery calcification in
hemodialysis patients with comparable lipid control: the Calcium Acetate
115. González EA, Sachdeva A, Oliver DA, Martin KJ. Vitamin D insufficiency
Renagel Evaluation-2 (CARE-2) study. Am J Kidney Dis 2008;51:952-65.
and deficiency in chronic kidney disease. A single center observational
99. Suki WN, Zabaneh R, Cangiano JL, Reed J, Fischer D, Garrett L, et al.
study. Am J Nephrol 2004;24:503-10.
Effect of sevelamer and calcium-based phosphate binders on mortality in
116. Gutiérrez OM, Isakova T, Andress DL, Levin A, Wolf M. Prevalence and
hemodialysis patients. Kidney Int 2007;72:1130-7.
severity of disordered mineral metabolism in Blacks with chronic kidney
100. St Peter WL, Liu J, Weinhandl E, Fan Q. A comparison of sevelamer and
disease. Kidney Int 2008;73:956-62.
calcium-based phosphate binders on mortality, hospitalization, and
117. O'Neill WC. The fallacy of the calcium-phosphorous product. Kidney Int
morbidity in hemodialysis: a secondary analysis of the Dialysis Clinical
Outcomes Revisited (DCOR) randomized trial using claims data. Am J
118. Worcester EM, Gillen DL, Evan AP, Parks JH, Wright K, Trumbore L, et al.
Kidney Dis 2008;51:445-54.
Evidence that postprandial reduction of renal calcium reabsorption
101. LaClair RE, Hellman RN, Karp SL, Kraus M, Ofner S, Li Q, et al.
mediates hypercalciuria of patients with calcium nephrolithiasis. Am J
Prevalence of calcidiol deficiency in CKD: a cross-sectional study across
Physiol Renal Physiol 2007;292:F66-75.
latitudes in the United States. Am J Kidney Dis 2005;45:1026-33.
119. Labriola L, Wallemacq P, Gulbis B, Jadoul M. The impact of the assay for
102. Elder GJ. Vitamin D levels, bone turnover and bone mineral density
measuring albumin on corrected (‘adjusted') calcium concentrations.
show seasonal variation in patients with chronic kidney disease stage 5.
Nephrol Dial Transplant 2009;24:1834-8.
Nephrology (Carlton) 2007;12:90-4.
120. Chonchol M, Locatelli F, Abboud HE, Charytan C, de Francisco AL, Jolly
103. Kooienga L, Fried L, Scragg R, Kendrick J, Smits G, Chonchol M. The
S, et al. A randomized, double-blind placebo-controlled study to assess
effect of combined calcium and vitamin D3 supplementation on serum
the efficacy and safety of cincalcet HCl in participants with CKD not
intact parathyroid hormone in moderate CKD. Am J Kidney Dis
receiving dialysis. Am J Kidney Dis 2009;53:197-207.
121. Malluche HH, Monier-Faugere MC, Wang G, Frazã O JM, Charytan C,
104. Brown EM. Clinical utility of calcimimetics targeting the extracellular
Coburn JW, et al. An assessment of cinacalcet HCl effects on bone
calcium-sensing receptor (CaSR). Biochem Pharmacol 2010;80:297-307.
histology in dialysis patients with secondary hyperparathyroidism. Clin
105. Nordal KP, Dahl E. Low dose calcitriol versus placebo in patients with
predialysis chronic renal failure. J Clin Endocrinol Metab 1988;67:929-
122. Block GA, Martin KJ, de Francisco Al, Turner SA, Avram MM, Suranyi
MG, et al. Cinacalcet for secondary hyperparathyroidism in patients
106. Hamdy NA, Brown CB, Kanis JA. Intravenous calcitriol lowers serum
receiving hemodialysis. Kidney Int 2005;68:1793-1800.
calcium concentrations in uraemic patients with severe
123. Lindberg JS, Culletin B, Wong G, Borah MF, Clark RV, Shapiro WB, et al.
hyperparathyroidism and hypercalcaemia. Nephrol Dial Transplant
Cinacalcet HCl, an oral calcimimetic agent for the secondary
hyperparathyroidism in hemodialysis and peritoneal dialysis: a
107. Coburn JW, Maung HM, Elangovan L, Germain MJ, Lindberg JS,
randomized, double blind, multicenter study. J Am Soc Nephrol
Sprague SM, et al. Doxercalciferol safely suppresses PTH levels in
patients with secondary hyperparathyroidism associated with chronic
124. Moe SM, Chertow GM, Coburn JW, Quarles LD, Goodman WG, Block
kidney disease stages 3 and 4. Am J Kidney Dis 2004;43:877-90.
GA, et al. Achieving NKF-J/DOQI bone metabolism and disease treatment
108. Abboud H, Coyne D, Smolenski O, Anger M, Lunde N, Qiu P, et al. A
goals with cinacalcet HCL. Kidney Int 2005;67:760-71.
comparison of dosing regimens of paricalcitol capsule for the treatment
125. Sterrett JR, Strom J, Stummvoll HL, Bahner U, Disney A, Soroka SD, et al.
of secondary hyperparathyroidism in CKD stages 3 and 4. Am J Nephrol
Cinacalcet HCL (Sensipar/Mimpara) is an effective chronic therapy for
hemodialysis patients with secondary hyperparathyroidism. Clin Nephrol
109. Baker LR, Muir JW, Sharman VL, Abrams SM, Greenwood RN, Cattell
WR, et al. Controlled trial of calcitriol in hemodialysis patients. Clin
126. Kestenbaum B, Andress DL, Schwartz SM, Gillen DL, Seliger SL, Jadav PR,
et al. Survival following parathyroidectomy among United Sates dialysis
110. Nakane M, Fey TA, Dixon DB, Ma J, Brune ME, Li YC, et al. Differential
patients. Kidney Int 2004;66:2010-6.
effects of Vitamin D analogs on bone formation and resorption. J
127. Trombetti A, Stoermann C, Robert JH, Herrmann FR, Pennisi P, Martin PY,
Steroid Biochem Mol Biol 2006;98:72-7.
et al. Survival after parathyroidectomy in patients with end-stage renal
111. Joist HE, Ahya SN, Giles K, Norwood K, Slatopolsky E, Coyne DW.
disease and severe hyperparathyroidism. World J Surg 2007;31:1014-21.
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 25
Resumen de recomendaciones
1. EVALUACIÓN DE LAS ALTERACIONES BIOQUÍMICAS
Se recomienda medir los niveles séricos de calcio, fósforo, hormona paratiroidea intacta (PTHi) y fosfatasa alcalinacuando la tasa de filtración glomerular (TFG) es < 60 ml/min (
1C)
(SLANH).
La frecuencia de las mediciones de calcio, fósforo y PTHi debe basarse en la presencia de las anormalidades y en lavelocidad de progresión de la ERC (tabla 1). En aquellos pacientes que estén recibiendo tratamiento para TMO-ERC y en quienes se han detectado alteraciones bioquímicas, es razonable hacer mediciones más frecuentes paramonitorizar las tendencias y evaluar la eficacia del tratamiento y los efectos secundarios (
sin grado)
(SLANH).
En pacientes con ERC 3-5D se sugiere medir los niveles séricos de 25-hidroxi-vitamina D [25(OH)D] (calcidiol) yrepetirlos dependiendo del valor basal y las intervenciones terapéuticas (2C). También se sugiere tratar lainsuficiencia y la deficiencia de vitamina D de acuerdo a las estrategias recomendadas para la población general(
2C)
(KDIGO).
Se recomienda que los médicos sean informados de la metodología y los cambios en las técnicas, tipo de muestra(plasma o suero) y procesamiento utilizado por los laboratorios en las determinaciones bioquímicas en los TMO-ERC 3-5D, a fin de lograr una interpretación adecuada de los resultados (
1B)
(KDIGO).
2. EVALUACIÓN DE LAS ALTERACIONES ÓSEAS
El método diagnóstico más preciso para determinar el tipo de enfermedad ósea asociada a la ERC (osteodistrofiarenal) es la biopsia ósea con análisis histomorfométrico (
1A) (
SLANH).
Es razonable realizar una biopsia ósea en pacientes con estadios 3-5D de ERC en ciertas situaciones, entre las quese incluyen (
sin grado)(
SLANH): -
Fracturas o dolor óseo sin causa aparente.
Sospecha de enfermedad ósea asociada al aluminio.
Sospecha de osteomalacia.
Hipercalcemia o hipofosfatemia no explicadas.
Antes de comenzar tratamiento con bisfosfonatos.
Antes de paratiroidectomía.
En pacientes con ERC 3-5D con evidencia de TMO-ERC, se sugiere que no se realicen rutinariamente las pruebas paradeterminación de la densidad mineral ósea (DMO), debido a que no predicen los riesgos de fractura como en lapoblación general y, por otra parte, no permiten predecir el tipo de osteodistrofia renal (
2B)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5D, se sugiere utilizar las mediciones de PTH sérica o de la fosfatasa alcalinaespecífica del hueso para la evaluación de enfermedad ósea debido a que valores marcadamente altos o bajospermiten predecir el recambio óseo subyacente (
2B)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5D, se sugiere no medir rutinariamente los marcadores específicos de recambioóseo basados en la síntesis de colágeno (como el propéptido C-terminal de procolágeno tipo I) y su catabolismo(tales como el telopéptido de colágeno tipo I, piridinolina o desoxipiridinolina) (
2C)
(KDIGO).
En pacientes con ERC 3-5D, la medición de PTHi y fosfatasa alcalina no ha demostrado consistentemente unacorrelación con los cambios histológicos de la osteodistrofia renal (
2B)(
SLANH).
Se sugiere detectar la acidosis metabólica y eventualmente corregirla para evitar la pérdida de masa ósea ymuscular en el paciente con ERC 3-5 (
sin grado)(
SLANH).
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 26
Resumen de recomendaciones
3. EVALUACIONES DE LAS CALCIFICACIONES VASCULARES
En pacientes con ERC 3-5D se sugiere realizar una radiografía lateral de abdomen para detectar la presenciade calcificaciones vasculares. El ecocardiograma también pudiera ser utilizado para detectar calcificacionesvalvulares. Estos métodos diagnósticos pueden ser alternativas razonables a otros métodos más complejosque pudieran no estar disponibles, tales como la tomografía axial computada (TAC) o la tomografía de emisiónde electrones (EBCT) (
2C)
(KDIGO). Es razonable usar esta información para decidir el tratamiento de TMO-ERC (
singrado)(
SLANH).
Se sugiere que los pacientes con ERC 3-5D con calcificaciones vasculares o valvulares sean considerados de altoriesgo cardiovascular (
2A)
(KDIGO).
4. TRATAMIENTO DE LOS TMO-ERC
Se recomienda que las decisiones terapéuticas se basen en tendencias, más que en resultados individualesde laboratorio, y que se considere de manera conjunta toda la información disponible de las alteracionesdel metabolismo óseo y mineral asociadas a la ERC (
1C)
(KDIGO).
Se recomienda que las decisiones terapéuticas de TMO-ERC se basen en las concentraciones séricas decalcio y fósforo consideradas individualmente, en vez del producto calcio x fósforo (Ca x P) (
2D)
(KDIGO).
En pacientes con ERC 3-5D, se recomienda que las concentraciones séricas de calcio (ionizado o totalcorregido) se mantengan dentro del rango normal para el método utilizado (
2C)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5, se sugiere mantener el fósforo sérico en el rango normal (
2C). Enpacientes con ERC estadio 5D, se sugiere disminuir los niveles elevados de fósforo hacia el rango normal(
2C)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadio 5D, se sugiere usar una concentración de calcio en el líquido de hemodiálisisentre 1,25 y 1,50 mmol/l (2,5 y 3,0 mEq/l) (
2D)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5 (
2D) y 5D (
2B), se sugiere usar quelantes de fosfato para el tratamientode la hiperfosfatemia. Es razonable que la selección del quelante de fosfato tenga en consideración elestadio de la ERC, la presencia de otros componentes de TMO-ERC, terapias concomitantes y perfil deefectos secundarios (
sin grado)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5D e hiperfosfatemia, se recomienda restringir la dosis de quelantes defosfato a base de calcio y/o la dosis de calcitriol o análogos de la vitamina D en presencia de hipercalcemiapersistente o recurrente (
1B)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadios 3-5D e hiperfosfatemia, se sugiere restringir la dosis de quelantes de fosfatoa base de calcio en presencia de calcificación arterial (
2C) y/o enfermedad ósea dinámica (
2C) y/o si losniveles séricos de PTHi son persistentemente bajos (
2C)
(KDIGO).
En pacientes con ERC estadio 5D, se sugiere incrementar la eliminación de fósforo través de la diálisis en eltratamiento de hiperfosfatemia persistente (
2C)
(KDIGO).
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 27
Resumen de recomendaciones
Tratamiento dirigido a controlar las concentraciones séricas de fósforo y calcio
4.10. Los quelantes de fósforo que contienen calcio son efectivos para disminuir las concentraciones séricas de fósforo.
Sin embargo, su uso puede asociarse con hipercalcemia y con una mayor incidencia de calcificación vascular(
2C)
(SLANH).
4.11. Se recomienda restringir la dosis de quelantes de fósforo que contienen calcio hasta un máximo de 1.500 mg de
calcio elemental/día (
1B)
(SLANH). También se recomienda restringir o evitar el uso de quelantes de fósforo con calcioen presencia de hipercalcemia, calcificaciones vasculares, enfermedad ósea adinámica o niveles persistentementebajos de PTHi (
2C)
(KDIGO).
4.12. Los quelantes de fósforo que contienen aluminio no deberían usarse (
1C)
(SLANH).
4.13. En pacientes con ERC 3-5 con fósforo sérico normal o elevado, sugerimos no exceder la ingesta de
fósforo en la dieta de 800-1.000 mg/día, de forma aislada o en combinación con otros tratamientos(
2D)
(SLANH).
Tratamiento de las concentraciones séricas anormales de PTHi
4.14. Se desconoce el nivel óptimo de PTHi en pacientes con ERC 3-5. No obstante, sugerimos que aquellos
pacientes con niveles de PTHi por encima de lo normal para el ensayo empleado sean evaluados paradeterminar la presencia de hiperfosfatemia, hipocalcemia y valores bajos (deficiencia) de 25(OH)D (
2C)
(KDIGO).
Si están presentes, es razonable corregir estas anormalidades con una dieta baja en fósforo, quelantes defósforo, suplementos de calcio y/o vitamina D (
sin grado)
(SLANH).
4.15. En pacientes con ERC 3-5D que muestren un incremento progresivo y sostenido de los niveles de PTHi por
encima del límite superior del ensayo empleado, a pesar de la corrección de factores arriba mencionados,sugerimos iniciar tratamiento con calcitriol o análogos de la vitamina D (
2C)
(KDIGO).
4.16. En pacientes con ERC 5D, sugerimos mantener los niveles de PTHi en un rango aproximado de entre 2 y
9 veces el límite superior normal del ensayo (
sin grado)
(KDIGO).
4.17. En pacientes con ERC 5D que presenten cambios importantes en los niveles de PTHi en ambas direcciones
(superior e inferior) dentro del rango sugerido (2 a 9 veces el límite superior normal del ensayo), se sugiereel inicio o un cambio en la terapia para evitar la progresión de las alteraciones hacia niveles fuera de esterango (
2C)(
KDIGO).
4.18. En aquellos pacientes con ERC 5D que presenten una elevación o un incremento progresivo de la PTHi
sérica, sugerimos iniciar el uso de calcitriol, análogos de vitamina D, calcimiméticos o la combinación deestos dos grupos de agentes con el fin de reducir los niveles de PTHi (2B)
(KDIGO).
-
Es razonable que la selección inicial del fármaco para el control de la PTHi elevada esté basada en lasconcentraciones séricas de calcio y fósforo, así como otros aspectos de la TMO-ERC (
sin grado)
(KDIGO).
Es razonable que las dosis de los quelantes de fósforo, cálcicos y no cálcicos, sean ajustadas de maneraque no comprometan las concentraciones séricas normales de fósforo y calcio (
sin grado)
(KDIGO).
Se recomienda que, en aquellos pacientes con hipercalcemia (
1B)
(KDIGO) o hiperfosfatemia (
2D)
(KDIGO), el usode calcitriol y/o análogos de vitamina D sea reducido u omitido.
Se sugiere que, en pacientes con hipocalcemia, el uso de calcimiméticos sea reducido u omitido,dependiendo de su severidad, de la medicación concomitante y de la presencia de síntomas y signosclínicos (
2D)
(KDIGO).
Guias SLANH_2013_06 24/4/13 16:24 Página 28
Resumen de recomendaciones
Se sugiere que, si los niveles de PTHi disminuyen por debajo de 2 veces el límite superior normal delensayo, el uso de calcitriol, análogos de vitamina D y/o calcimiméticos sea reducido u omitido (
2C)
(KDIGO).
4.19. En pacientes con ERC 3-5D e hiperparatiroidismo severo que no responda al tratamiento médico/farmacológico, se
sugiere considerar la paratiroidectomía (
2B)
(KDIGO).
Source: http://www.slanh.net/wp-content/uploads/2014/07/practica_clinica_prevencion.pdf
Jaargang 16 ö nummer 3 ö september 2013 Kwartaaluitgave van de Nederlandse Vereniging voor Fysiotherapie binnen de Lymfologie Oedeemfysiotherapie ö OncologiefysiotherapieBachelor ö Master THE COMPRESSION COMPANY Van de redactie Oedeminus is een kwartaaluitgave van de NVFL, Van de voorzitter
Menopause Heidi D Nelson Lancet 2008; 371: 760–70 Menopause is the time of life when menstrual cycles cease, and is caused by reduced secretion of the ovarian Oregon Evidence-based hormones oestrogen and progesterone. Although menopause is a normal event for women, individual experiences